(Libertad Digital) El Real Madrid no atraviesa por su mejor momento. Lleva dos años sin ganar un título, ha sido eliminado de la Copa del Rey, tiene que remontar la eliminatoria de octavos de final ante el Arsenal en Highbury y, después de caer dando una triste imagen ante el Mallorca, se encuentra a diez puntos del Barcelona en Liga.
Mucho se rumorea sobre esta reunión de urgencia, desde posibles multas a los jugadores que han levantado la voz durante las últimas semanas, a que se convoquen elecciones. Después de esta reunión está convocada una rueda de prensa donde se saldrá de dudas.
La crisis en el seno de la plantilla del equipo blanco es más que patente. Ronaldo sacó a relucir la hemorragia interna con unas declaraciones justo antes del trascendental partido de Liga de Campeones ante el Arsenal en las que decía "no sentirse a gusto donde se es querido" y que esto podría afectar a las decisiones que tomase sobre su futuro. Al día siguiente, el Real Madrid ofreció una paupérrima imagen ante el Arsenal londinense y perdió (0-1), complicándose mucho su continuidad en la competición europea. Este lunes, Massimo Moratti ha abierto las puertas a Ronaldo para que vuelva al Inter de Milán. El máximo responsable del equipo italiano y el delantero brasileño han mantenido siempre una buena relación, incluso después de su salida del club milanista.
Un día después del descalabro, Raúl González, el capitán madridista, acusó al brasileño de "enturbiar la magia de la Champions" al "pensar más en él que en el equipo", añadiendo que "se equivocó de día". Benito Floro, director deportivo del Real Madrid, dijo en Punto Radio que las declaraciones de Ronaldo habían sido "inoportunas", que no eran "necesarias" y "que no había que darles mucho vuelo". Floro volvió a insistir en que había que centrarse, pero la plantilla no parece haberle hecho mucho caso.
El viernes pasado, en medio de la tormenta de declaraciones, López Caro trató de dar un golpe de autoridad para reconducir un vestuario a la deriva reprochándole a los dos jugadores que aireasen sus problemas en la prensa: "Esto no beneficia a nadie, las cosas hay que decirlas de puertas adentro", dijo el técnico.
La polémica ha tenido su punto más álgido después de el partido de este domingo ante el Mallorca, donde el Real Madrid perdió ante el Mallorca en Son Moix y su imagen sobre el terreno de juego fue apática y mala. El equipo blanco se adelantó con un gol de Sergio Ramos, quien, al final del partido dijo que cuando él marcó, "parecía que lo había hecho el Mallorca".
Esta noche, en El Tirachinas de la COPE, Ronaldo confirmaba que sus relaciones con Raúl no son nada buenas. "Cada uno dice lo que quiere y habla de lo que quiere. Raúl es responsable de sus palabras y yo de las mías, pero es cierto que sus palabras no han hecho más que empeorar más la situación", dijo el brasileño.