L D (EFE) De la Vega hizo estas consideraciones en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, durante la cual se refirió al "fracaso" de la huelga convocada para la jornada de ayer en el País Vasco y Navarra. Eludió pronunciarse sobre la citación en la Audiencia Nacional del portavoz de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi, por los actos violentos registrados en dicha huelga porque, según dijo, "el Gobierno respeta las decisiones judiciales".
En cuanto a las expectativas de paz en el País Vasco, la vicepresidenta primera insistió en que la condición del Ejecutivo es "el cese de todo tipo de violencia". "Cuando eso se produzca estaremos en otro escenario. Hoy no estamos, pero no significa que todo lo que hemos dicho no se corresponda con la realidad de lo que está ocurriendo", afirmó la vicepresidenta primera, quien recordó que el Ejecutivo ya advirtió de que este sería un proceso "largo, duro y difícil".
De la Vega también expresó la condena "absoluta y sin paliativos" ante "las bombas, los ruidos y las extorsiones" producidos últimamente por la banda terrorista y señaló que desde el Gobierno van a seguir trabajando en la lucha contra el terrorismo "como hasta ahora" lo han hecho "por los mismos cauces" y "con la máxima eficacia". "No cabe la violencia y los violentos saben que no tienen cabida. El futuro no es para ellos, el futuro es para la paz y eso es lo que desea la mayoría de la sociedad española", recalcó.
Respecto a la jornada de huelga, De la Vega consideró que el "fracaso" demuestra que "los terroristas y quienes los apoyan han perdido el poco respaldo social que pudieran haber tenido en algún momento" y eso, en su opinión, "es una buena noticia para la sociedad en general y para la sociedad vasca en particular, una buena noticia para todos los demócratas". La vicepresidenta primera del Gobierno pidió "prudencia" en torno a este proceso y recordó que "a la legalidad se llega por la legalidad y a la paz acabando con la violencia".
En cuanto a las expectativas de paz en el País Vasco, la vicepresidenta primera insistió en que la condición del Ejecutivo es "el cese de todo tipo de violencia". "Cuando eso se produzca estaremos en otro escenario. Hoy no estamos, pero no significa que todo lo que hemos dicho no se corresponda con la realidad de lo que está ocurriendo", afirmó la vicepresidenta primera, quien recordó que el Ejecutivo ya advirtió de que este sería un proceso "largo, duro y difícil".
De la Vega también expresó la condena "absoluta y sin paliativos" ante "las bombas, los ruidos y las extorsiones" producidos últimamente por la banda terrorista y señaló que desde el Gobierno van a seguir trabajando en la lucha contra el terrorismo "como hasta ahora" lo han hecho "por los mismos cauces" y "con la máxima eficacia". "No cabe la violencia y los violentos saben que no tienen cabida. El futuro no es para ellos, el futuro es para la paz y eso es lo que desea la mayoría de la sociedad española", recalcó.
Respecto a la jornada de huelga, De la Vega consideró que el "fracaso" demuestra que "los terroristas y quienes los apoyan han perdido el poco respaldo social que pudieran haber tenido en algún momento" y eso, en su opinión, "es una buena noticia para la sociedad en general y para la sociedad vasca en particular, una buena noticia para todos los demócratas". La vicepresidenta primera del Gobierno pidió "prudencia" en torno a este proceso y recordó que "a la legalidad se llega por la legalidad y a la paz acabando con la violencia".