L D (Europa Press) Varios dirigentes del PP consultados por la agencia Europa Press han coincidido en considerar que la decisión del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, de hacer pública su disposición a acompañar a Mariano Rajoy en las próximas listas al Congreso es "precipitada" y obedece a un intento de situarse como "delfín" del partido.
Ruiz Gallardón dijo este viernes a ABC que estaría dispuesto a aparecer con el presidente del PP en la próxima candidatura que presente a la Cámara Baja, puesto que, dice, ser diputado no es incompatible con la Alcaldía. "Ilustres predecesores míos como Tierno y Barranco –justifica el alcalde madrileño– han sido diputados simultáneamente al ejercicio de su responsabilidad de alcalde y han llevado la voz de Madrid al Congreso".
Pero la estrategia de Gallardón parece que empieza a percibirse. Según Europa Press, en el PP de Madrid no se ha hecho una lectura positiva de sus palabras en ABC y se apunta que, hace unas semanas, adelantó que la concejal Ana Botella sería su "número dos" en las listas para las próximas municipales, "sin tener en cuenta", recuerdan, que tanto la dirección nacional del partido como la organización regional tiene que participar en esas decisiones. Así, en la organización territorial que preside Esperanza Aguirre no se cree una casualidad que se anuncie, en primer lugar, el papel que desempeñará Botella en los próximos comicios y, semanas después, el propio Gallardón "se ofrezca a Rajoy para ir en sus listas".
Otros dirigentes nacionales consultados también por Europa Press recalcan que Gallardón ha pecado de "impaciencia" con su ofrecimiento para ir en las listas del PP al Congreso, puesto que, a su juicio, ha querido posicionarse como "delfín" sin haber pasado la prueba de las municipales.
Las declaraciones de Alberto Ruiz Gallardón respecto a la investigación del 11-M tampoco han pasado desapercibidas, sobre todo, porque las hizo desde al cálculo electoral. En la misma semana en la que Zaplana reafirmaba que no va a aceptar el "silencio" que se quiere imponer sobre el 11-M, el alcalde dijo que la obligación de los populares "no es ganar el poder con acciones judiciales, sino ganar en las urnas".
En medio de todo, la polémica implantación de los parquímetros en Madrid también empieza a apreciarse con preocupación desde el Partido Popular ya que el rechazo ciudadano puede traducirse también en una pérdida de votos, tanto para Ruiz Gallardón como para Esperanza Aguirre.