LD (Agencias) Al menos 156 jóvenes permanecen detenidos tras los enfrentamientos entre manifestantes contra la ley del primer empleo juvenil y la Policía. Varias calles de París y los alrededores de la Universidad de la Sorbona fueron escenario de batallas campales. Por segunda vez en tres días, los estudiantes, esta vez acompañados por obreros de sindicatos y trabajadores, se manifestaron para obligar al Gobierno conservador a retirar la polémica medida, que debe entrar en vigor en abril.
En los últimos instantes de la jornada de protesta en París, los agentes antidisturbios utilizaron gases lacrimógenos para dispersar a grupos violentos que les lanzaban piedras, quemaban automóviles y destrozaban mobiliario urbano. Cuando la Policía cargó, los radicales comenzaron a levantar barricadas. Siete agentes y diecisiete manifestantes resultaron heridos durante los tumultos
El primer conato de enfrentamiento tuvo lugar cuando una parte de la manifestación transcurría por la plaza de la Nación. Allí, decenas de jóvenes lanzaron piedras y botellas contra un grupo de policías antidisturbios. Los agentes, que se encontraban en una esquina de la plaza, respondieron lanzando gases lacrimógenos, lo que dispersó a los atacantes, que se reagruparon en una calle cercana donde incendiaron un coche, rompieron los escaparates de algunos comercios y destrozaron cabinas telefónicas. Posteriormente, cuando la manifestación había concluido y los participantes se habían dispersado, unas decenas de jóvenes permanecieron en la plaza y lanzaron objetos contra los agentes, que cargaron contra ellos.
En otras ciudades también se produjeron algunos incidentes al término de las manifestaciones contra el Contrato de Primer Empleo (CPE), que da a las empresas la posibilidad de despedir a los menores de 26 años durante los 24 primeros meses.
En Lille (norte), donde los sindicatos afirman haber reunido a 30.000 personas (11.000 según la policía), la marcha terminó con lanzamiento de piedras y huevos por algunos manifestantes contra los policías antidisturbios, que respondieron con gases lacrimógenos.
En Lyon (este), la manifestación contra el CPE se cruzó con otra convocada por la comunidad turca de la ciudad para protestar por la colocación de un monumento conmemorativo del genocidio armenio. Algunos de los participantes en ambos cortejos protagonizaron enfrentamientos y peleas.