(Libertad Digital) El presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ha criticado en declaraciones a TVE el posible encarcelamiento del portavoz de la organización ilegalizada Batasuna-ETA, Arnaldo Otegi, por la convocatoria de la jornada de huelga ilegal en el País Vasco y Navarro.
Ibarra quiso dejar claro que a él no le parece mal que "Otegi esté en la cárcel", pero seguidamente criticó que su posible entrada en prisión se deba a la convocatoria de una manifestación ilegal. Dijo que "en España hay una manifestación ilegal todos los días" y repitió que "ese delito lo cometen muchas gentes en España durante todos los días". Y añadió: "Si se empieza a meter en la cárcel a la gente por convocar manifestaciones ilegales vamos a tener que ampliar las cárceles", dijo el presidente extremeño. Conviene recordar que en esa jornada de huelga inducida por Batasuna se cometieron 103 actos violentos, incluidos los bombas colocadas por ETA en las carreteras de acceso al País Vasco.
Ibarra reiteró su apoyo a que personas como Otegi estén en la cárcel pero, dijo, "eso es una cosa y otra es vulnerar el estado de Derecho". El líder socialista aseguró que "si van a la cárcel no es por el delito cometido sino porque haya algún tipo de interés en descabezar a aquellos que pudieran servir como interlocutores para un proceso de final del terrorismo que todos los españoles estamos deseando que ocurra".
"Me gustaría mucho que pudiéramos resucitar a las victimas", dijo Rodríguez Ibarra, que acusó a los "hermanos y padres" –a los que parece no considera víctimas– de los asesinados por ETA de hablar en su nombre, pero no diciendo lo que ellos desearían. Después de acusar a los familiares de los asesinados de hablar en nombre de las víctimas, Ibarra no dudó en postularse él como interlocutor de los muertos. "Lo que quieren los que murieron o sufrieron el azote de una bomba", afirmó Ibarra, es que se acabe el terrorismo.
El ministro de Defensa, José Bono, recordó el historial como secuestrador y cómplice de ETA de Otegi y lo rechazó como interlocutor. El titular de Defensa añadió que "tanto costipado y catarro ponen de manifiesto la fuerza y la gallardía del personajillo".