LD (EFE) La medida fue anunciada por la ministra de Asuntos Exteriores austríaca, Ursula Plassnik , cuyo país preside este semestre la UE, al final de la cumbre europea de primavera celebrada en Bruselas. Plassnik leyó en una rueda de prensa una declaración de condena a Bielorrusia por la detención, en la noche de este jueves, de cientos de manifestantes pacíficos en Minsk, y por la falta de limpieza de los comicios.
Lukashenko, que lleva en el poder 12 años y modificó en un referéndum en 2004 la Constitución para poder aspirar a un nuevo mandato, ganó las elecciones del pasado domingo con más del 82 por ciento de los votos, tras una campaña electoral en la que fueron arrestados miembros de la oposición y clausurados varios medios de comunicación.
La UE pidió este viernes la "inmediata liberación" de los 200 opositores detenidos a lo largo de la noche anterior cuando acampaban en el centro de Minsk en protesta por el "fraude" electoral denunciado por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE). El ministro sueco de Asuntos Exteriores, Goran Persson , afirmó que Bielorrusia es "la última dictadura de Europa" y dijo que Europa debe "brindar todo su apoyo a las fuerzas democráticas del país".
La UE ha descartado sanciones económicas contra ese país para no castigar a su población civil y a la oposición democrática, "cuyos valerosos esfuerzos por avanzar la causa de la democracia en circunstancias difíciles merecen pleno reconocimiento y apoyo", según la nota leída por Plassnik. Bruselas ya ha limitado a un mínimo los contactos oficiales con el régimen de Minsk y mantiene una prohibición de visados contra seis altos funcionarios considerados responsables de fraude electoral en las elecciones legislativas y el referéndum de 2004. Sin embargo, la UE ha seguido prestando su apoyo a la sociedad civil, que recibió ayudas por valor de nueve millones de euros de la Comisión Europea el año pasado.
Lukashenko, que lleva en el poder 12 años y modificó en un referéndum en 2004 la Constitución para poder aspirar a un nuevo mandato, ganó las elecciones del pasado domingo con más del 82 por ciento de los votos, tras una campaña electoral en la que fueron arrestados miembros de la oposición y clausurados varios medios de comunicación.
La UE pidió este viernes la "inmediata liberación" de los 200 opositores detenidos a lo largo de la noche anterior cuando acampaban en el centro de Minsk en protesta por el "fraude" electoral denunciado por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE). El ministro sueco de Asuntos Exteriores, Goran Persson , afirmó que Bielorrusia es "la última dictadura de Europa" y dijo que Europa debe "brindar todo su apoyo a las fuerzas democráticas del país".
La UE ha descartado sanciones económicas contra ese país para no castigar a su población civil y a la oposición democrática, "cuyos valerosos esfuerzos por avanzar la causa de la democracia en circunstancias difíciles merecen pleno reconocimiento y apoyo", según la nota leída por Plassnik. Bruselas ya ha limitado a un mínimo los contactos oficiales con el régimen de Minsk y mantiene una prohibición de visados contra seis altos funcionarios considerados responsables de fraude electoral en las elecciones legislativas y el referéndum de 2004. Sin embargo, la UE ha seguido prestando su apoyo a la sociedad civil, que recibió ayudas por valor de nueve millones de euros de la Comisión Europea el año pasado.