L D (Europa Press) En defensa de la tramitación de esta iniciativa, el portavoz de Defensa de CiU, Josep Maldonado, subrayó que se debe proceder a una "cesión íntegra" del castillo, sin ningún tipo de "condicionantes", y recordó que el traspaso fue un compromiso adoptado por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en la campaña de las elecciones europeas en 2004.
Tras incidir en que este asunto no se ha resuelto desde hace varios años por "la reiterada incomprensión de los Gobiernos", Maldonado aseguró que la cesión que establece el proyecto aprobado por el Gobierno supone "un engaño inadmisible" y abogó por una propuesta de traspaso "digna" y "respetuosa" con la capital catalán. "¿Por qué se tiene que poner este condicionante a Barcelona cuando se ha demostrado reiteradamente que es respetuosa con la legislación vigente?, planteó el diputado nacionalista, antes de resaltar que existen más antenas de uso militar en diferentes edificios no custodiadas por el Ejército.
En este sentido, reclamó al Gobierno que le explique al ministro de Defensa, José Bono, que la cesión es un compromiso del jefe del Ejecutivo y que no puede tener las condiciones que se incluyeron en el texto aprobado el pasado viernes sino que debe permitir que Barcelona convierta la histórica fortaleza en un museo por la paz, destino de difícil consecución, a su juicio, si el castillo alberga un retén de militares. Maldonado incidió en que en Cataluña no existe ninguna "guerra de banderas" pero advirtió de que "los vientos traen tempestades" e imposiciones como las que considera que contiene el proyecto de Ley pueden llegar a fomentarla.
Por parte del Grupo Socialista, el diputado catalán Daniel Fernández, tras hacer un extenso repaso a la historia de la fortaleza, destacó que el Gobierno Zapatero ha sido el primero en afrontar "la asignatura pendiente" de la cesión y que espera conseguir un respaldo mayoritario y unánime al proyecto de Ley en su tramitación parlamentaria. Aseguró que el Ejecutivo y el PSOE trabajarán "obstinada y tozudamente" para obtener el respaldo de todas las formaciones a su propuesta de cesión y conseguir que el castillo de Montjuic sea un edificio de "concordia".
ERC y la "devolución de la legalidad democrática"
El portavoz de Defensa de ERC, Joan Puig, aseguró que la cesión no debe considerarse como tal sino como "devolución de la legalidad democrática" puesto que el castillo de Montjuic pertenecía a la Generalidad Catalana antes de la llegada del régimen franquista. Como prueba de su afirmación, exhibió una portada del diario La Vanguardia, fechada en agosto de 1936 y titulada "La bandera catalana ondea en Montjuic". Puig subrayó que la cesión de la fortaleza no sólo es un compromiso del jefe del Ejecutivo sino que también el propio ministro de Defensa al inicio de la legislatura se comprometió a restituir las propiedades incautadas por el franquismo, por lo que insistió en que debe procederse a la devolución.
El portavoz del PP, Jorge Fernández Díaz, expresó su apoyo al proyecto de cesión del Gobierno y a las condiciones impuestas por considerar que la normativa sobre banderas se incumple "sistemáticamente" en algunos barrios barceloneses como Gracia o como otros en los que se prefiere no izar las enseñas con tal de no mostrar la españolas. Fernández Díaz instó, por último, a buscar un acuerdo entre los partidos políticos para convertir el castillo de Monjtuic en una fortaleza en servicio de "la paz, la verdad y la concordia".
Por último, el portavoz de IU-ICV, Joan Herrera, recalcó que la cesión aprobada por el Ejecutivo ha cosechado un rechazo unánime de los partidos catalanes por recoger las "excentricidades" del titular de Defensa, José Bono, a quien acusó de "agitar" una guerra de banderas hasta ahora inexistente en la Ciudad Condal. Herrera justificó su apoyo a la proposición de CiU asegurando que la cesión debe realizarse sin condiciones y anunció que presentará una enmienda de devolución al texto del Ejecutivo Zapatero sino hay un compromiso de convertirlo en una cesión íntegra.