L D (Agencias) En rueda de prensa tras la Junta de Portavoces, el portavoz parlamentario del PP, Eduardo Zaplana, destacó que "habría un conflicto político de primera magnitud, de gran alcance y trascendencia si, después del referéndum, el TC declarara inconstitucionales preceptos del Estatuto de Cataluña".
Por ello, consideró una "necesidad imperiosa" recuperar, para las reformas de Estatutos de Autonomía, la norma derogada para impedir dilatar los trámites de modernización hace veinte años.m Pero según Zaplana, entonces nada hacía prever una ruptura de la "norma no escrita" del consenso entre los dos grandes partidos en asuntos autonómicos.
Por ello, consideró una "necesidad imperiosa" recuperar, para las reformas de Estatutos de Autonomía, la norma derogada para impedir dilatar los trámites de modernización hace veinte años.m Pero según Zaplana, entonces nada hacía prever una ruptura de la "norma no escrita" del consenso entre los dos grandes partidos en asuntos autonómicos.
"Si efectivamente no hay nada que temer y como se nos ha dicho el otro día el texto es constitucional, ¿tan grave es que se pueda someter al Tribunal Constitucional de forma previa? Fíjense, por esperar unos días, queda el proceso absolutamente garantizado y salvado y no entramos en problemas políticos de una gran magnitud y trascendencia", argumentó el portavoz popular.
Para asegurar la paralización y estudio por parte del Constitucional del proyecto catalán, el PP introduce en su proposición el matiz de que la Ley Orgánica sería de aplicación a las reformas que estén en trámite en la actualidad. Los populares van a intentar la entrada en vigor del recurso previo también en el trámite de reforma del Tribunal Constitucional.
El portavoz popular hizo ya referencia a la necesidad de retomar esta ley cuando el pasado 15 de marzo el alto tribunal decidió no admitir a trámite su recurso contra la tramitación en el Congreso de la reforma del Estatuto catalán. Zaplana aseguró que su partido seguirá denunciando "los despropósitos" y los "aspectos claramente inconstitucionales" del texto que ahora –dijo– "se intentan camuflar".
Además, con este propósito, el PP pedirá después de Semana Santa la comparecencia ante la Cámara Baja de todos los ministros del Gobierno para que informen sobre los cambios que supondrá en sus competencias la entrada en vigor de la reforma del estatuto catalán.
"Auténtica parida jurídica"
También, en rueda de prensa en el Congreso, López Garrido señaló que el partido de Mariano Rajoy sólo persigue con su proposición de Ley sobre el recurso previo, "boicotear" el procedimiento de reforma del Estatuto de Cataluña porque ya "no tiene argumentos de fondo" y se ha quedado "aislado". Por eso, dijo, "intenta por vías espúreas obstaculizar el proceso" y "cambiar las reglas del juego a mitad del partido".
López Garrido aseguró que querer presentar este recurso antes de que se haya pronunciado el pueblo catalán está "al margen de la Carta Magna y de la ley" porque la norma "no existe". Aunque recordó que este instrumento se suprimió del ordenamiento jurídico hace más de diez años, añadió que el PP debería en todo caso plantear la recuperación del recurso previo después de que se hubiera producido el referéndum porque "antes no existe la norma". "Es inconstitucional hacer un recurso previo antes de que acabe el trámite de una norma porque no existe", enfatizó López Garrido, para añadir que se trata de un "disparate absurdo" y de una "auténtica parida jurídica"
En este sentido, recalcó que el Tribunal Constitucional ya ha asegurado en dos ocasiones, una con el denominado Plan Ibarrexte y otra con el propio Estatuto, que "no cabe hacer recursos contra borradores que no son ley". Por eso, reiteró que la proposición del PP –que quiere llevar al Pleno antes del referéndum en Cataluña– es "absolutamente inconstitucional".
Asimismo, criticó que el PP no quiera que los ciudadanos se pronuncien sobre el Estatuto en un referéndum y, sin embargo, luego esté recabando firmas en toda España contra el texto para hacer un referéndum "al margen de la ley". "Es el mundo al revés", proclamó, tras censurar que los populares no quieran "sujetarse a las reglas democráticas". Por último, el secretario general del Grupo Socialista lamentó que el principal partido de la oposición haya declarado "la guerra sin cuartel" y haya emprendido "la cruzada del siglo XXI" contra la reforma estatutaria catalana. A su juicio, el PP hace una oposición de "desgaste y sin razones, planteando cosas imposibles y obstaculizando cualquier iniciativa, sin ir al fondo de la cuestión y sin alternativas reales".