L D (EFE) En su declaración institucional con motivo de la Diada de Sant Jordi, leída en el Palau de Pedralbes de Barcelona, Maragall ha destacado que, después de muchos meses de trabajo y negociación, que en algunas ocasiones han podido "oscurecer" y "tapar" la labor del gobierno, ahora "podemos tocar con los dedos" la aprobación del Estatuto. Maragall ha subrayado que los representantes del Parlamento catalán y de las Cortes Españolas "hemos sido capaces de dialogar y entendernos, a pesar de la desmesurada y agresiva campaña de quienes se oponen a la mejora del autogobierno de Cataluña".
Según el presidente de la Generalitat, "el nuevo Estatut ya es una realidad, que es mucho más importante que las vicisitudes que se han tenido que pasar para llegar". "Después de todo debe quedar aquello que es esencial, que es que el nuevo Estatut es el fruto del pacto entre la representación de la soberanía popular catalana, que es el Parlament, y la representación de la soberanía popular española. Es el acuerdo entre dos soberanías, entre dos Parlamentos. No podía ser de otra forma, así ha sido y está bien hecho", ha asegurado.
Maragall ha afirmado que "de este pacto ha nacido el nuevo Estatut, y del nuevo Estatut ha nacido la renovación de otros estatutos, acompañada de la paz vasca, esperemos". "Ahora es el momento de darnos cuenta del valor de lo que está pasando, es el momento de comparar lo que hemos tenido con lo que tenemos y lo que tendremos, éste es el ejercicio que hemos de hacer como ciudadanos y como pueblo antes del referéndum: constatar que el nuevo Estatut es un paso de gigante en relación con el Estatut de 1979".
Se trata, en su opinión, de un texto que "reconoce mejor los derechos de los ciudadanos, es un Estatuto de los derechos. Recoge mejor nuestra identidad nacional, nos dota de más poder político para autogobernarnos. Nos otorga más competencias y nos da más garantías y recursos para ejercer las competencias nuevas".
"Es un Estatut que mira al futuro y no al pasado, orientado sobre todo al servicio de las personas, no es un Estatut proclamatorio ante Dios y la historia solamente. Es un Estatut orientado a decir a las personas de Cataluña qué es lo que tienen derecho a tener y qué es lo que tendrán y cuáles son sus obligaciones como ciudadanos", ha añadido.
Ahora que el Estatuto "está dando sus últimos pasos antes del gran acto democrático que debe ser su ratificación por el pueblo catalán", Maragall ha invitado "a todos los catalanes a hacer juntos este ejercicio previo al día de la gran decisión democrática: el ejercicio de la constatación de lo que tenemos entre manos".
Según el presidente catalán, "entre el Sant Jordi de 2005 y el de 2006 ha habido unos meses de trabajo muy intenso, que era lo que tocaba hacer, meses de trabajo que no han impedido que el Gobierno gobernara pero que han tapado la gobernación del Gobierno".
"Este oscurecimiento del Gobierno lo doy por bien hecho, en la medida que nos ha permitido no sólo gobernar sino también legislar sobre nuestra gobernación", ha agregado.
Según el presidente de la Generalitat, "el nuevo Estatut ya es una realidad, que es mucho más importante que las vicisitudes que se han tenido que pasar para llegar". "Después de todo debe quedar aquello que es esencial, que es que el nuevo Estatut es el fruto del pacto entre la representación de la soberanía popular catalana, que es el Parlament, y la representación de la soberanía popular española. Es el acuerdo entre dos soberanías, entre dos Parlamentos. No podía ser de otra forma, así ha sido y está bien hecho", ha asegurado.
Maragall ha afirmado que "de este pacto ha nacido el nuevo Estatut, y del nuevo Estatut ha nacido la renovación de otros estatutos, acompañada de la paz vasca, esperemos". "Ahora es el momento de darnos cuenta del valor de lo que está pasando, es el momento de comparar lo que hemos tenido con lo que tenemos y lo que tendremos, éste es el ejercicio que hemos de hacer como ciudadanos y como pueblo antes del referéndum: constatar que el nuevo Estatut es un paso de gigante en relación con el Estatut de 1979".
Se trata, en su opinión, de un texto que "reconoce mejor los derechos de los ciudadanos, es un Estatuto de los derechos. Recoge mejor nuestra identidad nacional, nos dota de más poder político para autogobernarnos. Nos otorga más competencias y nos da más garantías y recursos para ejercer las competencias nuevas".
"Es un Estatut que mira al futuro y no al pasado, orientado sobre todo al servicio de las personas, no es un Estatut proclamatorio ante Dios y la historia solamente. Es un Estatut orientado a decir a las personas de Cataluña qué es lo que tienen derecho a tener y qué es lo que tendrán y cuáles son sus obligaciones como ciudadanos", ha añadido.
Ahora que el Estatuto "está dando sus últimos pasos antes del gran acto democrático que debe ser su ratificación por el pueblo catalán", Maragall ha invitado "a todos los catalanes a hacer juntos este ejercicio previo al día de la gran decisión democrática: el ejercicio de la constatación de lo que tenemos entre manos".
Según el presidente catalán, "entre el Sant Jordi de 2005 y el de 2006 ha habido unos meses de trabajo muy intenso, que era lo que tocaba hacer, meses de trabajo que no han impedido que el Gobierno gobernara pero que han tapado la gobernación del Gobierno".
"Este oscurecimiento del Gobierno lo doy por bien hecho, en la medida que nos ha permitido no sólo gobernar sino también legislar sobre nuestra gobernación", ha agregado.