Sobre las falsedades vertidas sobre él recordó, además de su supuesta conexión con Bono, que dijeran que él era masón o que su mujer es "prima de no sé qué ministro". De estas mentiras culpó a "varios medios de información".
Gómez Arruche realizó estas declaraciones a los periodistas, tras asistir a la clausura de los ejercicios tácticos de la Gendarmería Europea, una Fuerza en gestación compuesta por guardias civiles españoles, carabinieri italianos, gendarmes franceses, guardias republicanos portugueses y miembros de la Royal Marechausse holandesa. El ex director general de la Benemérita dijo haberse sentido respaldado en todo momento tanto por el nuevo ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, como por su "buen amigo" José Antonio Alonso. Añadió que regresará en su grado de teniente general al Ejército del Aire y que volverá a estar al mando de Alonso.
Gómez Arruche recalcó que este momento "era el adecuado". "Parte ha sido consensuado entre la Presidencia del Gobierno y yo, entre los dos de común acuerdo, por varios y diversos motivos y razonamientos, que yo he creído que para la Guardia civil era lo mejor que cambiase el director. Me fue concedida la oportunidad de poder decidir y elegir", explicó.
Recordó haber "hecho bastantes cosas" en la Guardia Civil que se reconocerán en el futuro, para lo que ha dedicado 20 horas al día "en cuerpo y alma" al Instituto Armado. Se volvió a referir al "caso Roquetas" para defender que lo único que hizo en su intervención más criticada fue reconocer que la hoja de sanciones del teniente a cargo del cuartel estaba "limpia". "Era verdad y lo sigo sosteniendo", explicó.