Casillas da una de cal y otra de arena, y el Madrid sale vivo del Reyno de Navarra con tres puntos de oro

(Libertad Digital) El primer tiempo fue emocionante, pero también con un fútbol muy trabado, y apenas se disputaron minutos de tiempo efectivo. El Osasuna lo intentó con el juego directo y la estrategia, mientras que los blancos carecieron de argumentos para sorprender a Ricardo. Las ocasiones claras de gol brillaron por su ausencia. Pero Baptista y Delporte sí dejaron sus destellos de calidad sobre el Reyno de Navarra. El brasileño del Real Madrid le hizo un sombrero a Josetxo en el área, pero su remate a bocajarro lo despejó Ricardo a saque de esquina (m.5). Mientras, el francés del Osasuna trató de sorprender a Casillas a balón parado, aunque su lanzamiento directo de falta se estrelló en el poste (m.37).

Tras el descanso, la primera jugada por la banda del Madrid tuvo premio. Robinho penetró por la izquierda y metió un balón al área a Raúl, quien cedió atrás a la posición de Baptista, derribado por Raúl García en el primer penalti de la noche. El propio Baptista asumió la responsabilidad y ejecutó la pena máxima de forma inapelable para poner el 0-1 en el marcador (m.50).

El penalti encrespó los ánimos de la afición local y el partido se volvió todavía más trabado, pero el Osasuna tuvo su oportunidad en un penalti del ex osasunista Pablo García a Webó, tras un centro por la izquierda de Delporte. Puñal, el especialista del equipo de Javier Aguirre en los penaltis y hasta ahora sin fallo alguno en esta especialidad como profesional y tras once transformados en Primera, no atinó el disparo y Casillas estuvo providencial para sellar la victoria blanca.

Iker era hasta ese momento el "Doctor Jekyll" del conjunto de López Caro. Pero a diez minutos para el final se transformó por completo en "Mister Hyde" al ser expulsado. Daudén Ibáñez le mostró la segunda amarilla por pérdida de tiempo al echar la pelota fuera del campo, ante la presencia de Webó, en un despeje fuera del área. El técnico madridista tuvo que dar entrada entonces al meta suplente Diego López, quien tuvo que aguantar las acometidas de un Osasuna que no se dio por vencido y que lo intentó por medio de Delporte, David López y Bernardo Romeo. El partido, que se prolongó durante seis minutos por las pérdidas de tiempo, acabó con una fea entrada de Moha sobre Baptista que bien le hubiera podido costar la tarjeta roja directa pero que, sin embargo, le acabó perdonando el árbitro.