L D (EFE) La solidaridad entre los jugadores del Real Madrid ha sido la clave para que se llevasen la victoria del Palau Blaugrana. Cuando Louis Bullock se vio asfixiado por Rodrigo de la Fuente, el resto se repartieron el trabajo en ataque. Así, el equipo blanco se olvidó pronto de las bajas que tiene, la última la de Axel Hervelle. Y, además, los dos fichajes blancos para estas eliminatorias por el título, Filip Videnov y, sobre todo, Nenad Sinanovic sacaron lo mejor de si mismos por primera vez desde su llegada al Real Madrid.
Maljkovic no tenía más que nueve jugadores para inscribir en el acta y contó con ocho -la excepción fue Héctor García-, pero Ivanovic pareció compadecerse de las carencias de su compatriota y también limitó su rotación a nueve de sus efectivos. El Real Madrid respondió así cuando más lo necesitaba, aunque todavía debe protagonizar un 3-0 consecutivo si quiere remontar la eliminatoria, aunque ya ha conseguido el primero de esos hipotéticos triunfos. En los primeros minutos, el Winterthur Barcelona demostró una superioridad aplastante, en base a tres factores como fueron el acierto desde el perímetro de Shammond Williams, la defensa de Rodrigo de la Fuente sobre Louis Bullock y la envergadura bajo los tableros de Gregor Fucka y Denis Marconato.
Esas claves llevaron el marcador a una diferencia de diez puntos a favor de los azulgrana en tan sólo cinco minutos (14-4, min.5) y dejaban en evidencia, entre otras cosas, la facilidad con la que el equipo de Dusko Ivanovic anotaba mientras al Real Madrid le faltaba la referencia de Bullock. La tendencia del partido cambió tras una nueva ventaja barcelonista de diez puntos (16-6, min.7), cuando Bozidar Maljkovic puso en pista a Nenad Sinanovic y sentó a Hernández-Sonseca. Sinanovic se implicó en el partido, al menos lo suficiente como para que el mermado juego interior blanco no se quedara sin aire, y los ocho jugadores empleados por Maljkovic empujaron para que el equipo no tirase la toalla antes de tiempo.
Sin la aportación ofensiva de Louis Bullock, cada jugador madridista aportó su granito de arena con el resultado de parcial de 0-11 y primera ventaja para ellos todavía en el primer cuarto (16-17, min.10). La diferencia a favor del Real Madrid aumentó en los inicios del segundo periodo (18-22, min.12), gracias a que todos los jugadores anotaban para suplir a Bullock. El Winterthur Barcelona recurrió entonces a la ayuda de sus pívots y a una mejor defensa para reaccionar con un primer parcial de 6-0 que les situó de nuevo por delante (24-22, min.13) y se fue de seis puntos después de un segundo de 9-0 (33-27). Al descanso, el marcador reflejaba un 38-33 del que buena parte de la culpa la tenía la dificultad que encontraba Maljkovic para hacer fuerte a su equipo en la pintura.
En la reanudación, una zona sirvió para frenar al Winterthur Barcelona y, en ataque, el Real Madrid se reencontró con Louis Bullock, gracias en parte a la rotación de calidad bajo tableros que aportó Sinanovic. En el minuto 28, los madridistas disponían ya de una ventaja a su favor de diez puntos (44-54), aunque el rival respondió con un parcial de 7-0 para llegar a la conclusión del tercer periodo con un 51-56 que dejaba el partido abierto. Todo apuntó al comenzar el segundo cuarto a que el Real Madrid había dado sus últimas bocanadas de esta temporada después de una salida fulgurante del Winterthur Barcelona que concluyó en un 12-0 para los azulgrana (63-56).
Los triples de Shammond Williams y una técnica a Sinanovic tras la que los azulgrana dispusieron de cuatro tiros libres y posesión parecieron sentenciar el duelo. Las diferencias, sin embargo, no eran insalvables y, con Louis Bullock y Mous Sonko enchufados, comenzó un intercambio ofensivo desde el perímetro del que salió ganador el Real Madrid.
La vuelta definitiva al marcador se produjo tras un triple inverosímil de Sinanovic (73-75, min.39) y Bullock remató con otro (73-78) una faena que fuerza el cuarto duelo de la serie. Una pérdida de balón final de Williams fue la sentencia definitiva para un Winterthur Barcelona que, ahora, deberá jugar, cuando menos, un cuarto partido el domingo que no entraba en su guión, aunque habrá que ver si los jugadores del Real Madrid son capaces de mantener la piña en Vistalegre.
Maljkovic no tenía más que nueve jugadores para inscribir en el acta y contó con ocho -la excepción fue Héctor García-, pero Ivanovic pareció compadecerse de las carencias de su compatriota y también limitó su rotación a nueve de sus efectivos. El Real Madrid respondió así cuando más lo necesitaba, aunque todavía debe protagonizar un 3-0 consecutivo si quiere remontar la eliminatoria, aunque ya ha conseguido el primero de esos hipotéticos triunfos. En los primeros minutos, el Winterthur Barcelona demostró una superioridad aplastante, en base a tres factores como fueron el acierto desde el perímetro de Shammond Williams, la defensa de Rodrigo de la Fuente sobre Louis Bullock y la envergadura bajo los tableros de Gregor Fucka y Denis Marconato.
Esas claves llevaron el marcador a una diferencia de diez puntos a favor de los azulgrana en tan sólo cinco minutos (14-4, min.5) y dejaban en evidencia, entre otras cosas, la facilidad con la que el equipo de Dusko Ivanovic anotaba mientras al Real Madrid le faltaba la referencia de Bullock. La tendencia del partido cambió tras una nueva ventaja barcelonista de diez puntos (16-6, min.7), cuando Bozidar Maljkovic puso en pista a Nenad Sinanovic y sentó a Hernández-Sonseca. Sinanovic se implicó en el partido, al menos lo suficiente como para que el mermado juego interior blanco no se quedara sin aire, y los ocho jugadores empleados por Maljkovic empujaron para que el equipo no tirase la toalla antes de tiempo.
Sin la aportación ofensiva de Louis Bullock, cada jugador madridista aportó su granito de arena con el resultado de parcial de 0-11 y primera ventaja para ellos todavía en el primer cuarto (16-17, min.10). La diferencia a favor del Real Madrid aumentó en los inicios del segundo periodo (18-22, min.12), gracias a que todos los jugadores anotaban para suplir a Bullock. El Winterthur Barcelona recurrió entonces a la ayuda de sus pívots y a una mejor defensa para reaccionar con un primer parcial de 6-0 que les situó de nuevo por delante (24-22, min.13) y se fue de seis puntos después de un segundo de 9-0 (33-27). Al descanso, el marcador reflejaba un 38-33 del que buena parte de la culpa la tenía la dificultad que encontraba Maljkovic para hacer fuerte a su equipo en la pintura.
En la reanudación, una zona sirvió para frenar al Winterthur Barcelona y, en ataque, el Real Madrid se reencontró con Louis Bullock, gracias en parte a la rotación de calidad bajo tableros que aportó Sinanovic. En el minuto 28, los madridistas disponían ya de una ventaja a su favor de diez puntos (44-54), aunque el rival respondió con un parcial de 7-0 para llegar a la conclusión del tercer periodo con un 51-56 que dejaba el partido abierto. Todo apuntó al comenzar el segundo cuarto a que el Real Madrid había dado sus últimas bocanadas de esta temporada después de una salida fulgurante del Winterthur Barcelona que concluyó en un 12-0 para los azulgrana (63-56).
Los triples de Shammond Williams y una técnica a Sinanovic tras la que los azulgrana dispusieron de cuatro tiros libres y posesión parecieron sentenciar el duelo. Las diferencias, sin embargo, no eran insalvables y, con Louis Bullock y Mous Sonko enchufados, comenzó un intercambio ofensivo desde el perímetro del que salió ganador el Real Madrid.
La vuelta definitiva al marcador se produjo tras un triple inverosímil de Sinanovic (73-75, min.39) y Bullock remató con otro (73-78) una faena que fuerza el cuarto duelo de la serie. Una pérdida de balón final de Williams fue la sentencia definitiva para un Winterthur Barcelona que, ahora, deberá jugar, cuando menos, un cuarto partido el domingo que no entraba en su guión, aunque habrá que ver si los jugadores del Real Madrid son capaces de mantener la piña en Vistalegre.