(Libertad Digital) La decisión de José Luis Rodríguez Zapatero de comunicar la negociación con ETA en rueda de prensa sin preguntas en el Congreso y no mediante una comparecencia con debate como había anunciado hasta la saciedad ha dejado estupefactos hasta a los diputados socialistas, que mostraron su desconcierto y sorpresa por el formato elegido finalmente por el presidente en declaraciones a Europa Press.
Así, en los pasillos del Congreso y en los corrillos podía oírse a los parlamentarios del PSOE preguntarse unos a otros sobre la manera elegida y después, sobre si su secretario general admitiría preguntas. Incluso, un histórico dirigente del partido comentó con ironía a otro 'veterano' de la Cámara habría que "incluir" una "nueva figura en el Reglamento del Congreso", esto es, incorporar la "rueda de prensa" como "comparecencia parlamentaria".
Otros se preparaban para asistir a una "liturgia nueva", en sus palabras, mientras que algunos asumían que no sabían absolutamente nada --a pesar de que el Pleno de hoy comenzó a las ocho de la mañana-- y que estas maneras podían ponerles en el punto de mira de la crítica. "Conocerá él las claves, porque ni yo ni nadie que conozca las sabe", indicaba otro sorprendido diputado vasco. Algún otro admitía mala gestión de las formas y se preguntaba por qué el jefe del Ejecutivo no había optado por hacer su anuncio ante la Cámara. Incluso algunos se permitieron citar las palabras últimas de Hamlet antes de morir, cuando agonizante pide a su amigo Horacio que cuente la tragedia. "El resto es silencio", señaló este miembro del llamado sector 'guerrista' parafraseando la obra de Shakespeare.
Los interlocutores de Rubalcaba explicaron después que, según Interior, se había optado por este formato para evitar una nueva bronca parlamentaria con el primer partido de la oposición, el PP. El presidente del Gobierno, en su declaración institucional, zanjó la cuestión asumiendo la autoría de la decisión: "La forma es responsabilidad exclusiva del Gobierno".
Lo sorprendente es que Zapatero criticaba el 6 de junio a Aznar por hacer lo mismo. El presidente del Gobierno leyó una intervención de José María Aznar en La Moncloa explicando por qué no había comunicado el inicio de los contactos apelando a la "responsabilidad compartida y la responsabilidad intransferible" del presidente del Gobierno para dar "el toque de partida" del diálogo con ETA. "Yo no voy a dar la señal hoy porque quiero que sea compartido".