(Libertad Digital) En la apertura del cursos de La Granda, dedicado al pensamiento español, el ex jefe de la Casa Real, Sabino Fernández Campo, habló con claridad sobre los asuntos de actualidad que marcan la agenda política actual.
En primer lugar, según informa La Nueva España, Fernández Campo mostró su recelo sobre el hecho de que los etarras dejen de matar pese a las negociaciones del Gobierno de Zapatero con la organización terrorista. Así, dudó que "una banda que ha estado treinta años asesinando para conseguir sus objetivos deje de matar por nada". Además, reclamó al Ejecutivo socialista que informe de "qué conversaciones se están llevando a cabo y qué cesiones se están haciendo para que ETA se avenga a dejar las armas y dejar de matar".
Fernández Campo, que fue durante diecisiete años la mano derecha de Don Juan Carlos, ha reivindicado el derecho del Rey de España a opinar sobre el proceso estatutario desencadenado en esta legislatura, "aunque de forma discreta y anticipada", puntualizó. "La principal función del Rey es la que no se ve, esto es, la de ser un poder moderador que aconseje prudencia y advierta de por dónde pueden ir las cosas", explicó el ex jefe de la Casa Real, que no desaprovechó para dejar patente su malestar sobre una de las referencias que Rodríguez Zapatero hizo sobre Don Juan Carlos: "Esa mezcla del 'rey republicano', me cuesta trabajo entenderla", apostilló.
El general asturiano también expresó su preocupación por el revisionismo histórico practicado desde la izquierda para exaltar el régimen republicano: "Yo viví la II República y no fue precisamente una cosa ideal, porque desembocó en la ruptura total y la guerra civil. Debemos acordarnos de lo que pasó y debe darse a la juventud una información fidedigna de lo ocurrido. Debemos superarla, pero no olvidarla", sentenció.