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Abucheos y silbidos vuelven a acompañar a Zapatero en el desfile de las Fuerzas Armadas

El público presente en el desfile del día de la Hispanidad ha vuelto a abuchear al presidente. Entre silbidos, José Luis Rodríguez Zapatero ha saludado a las autoridades antes de situarse en la tribuna para presenciar el acto. Pero cuando abandonaba el lugar, los abucheos y gritos se han escuchado con más fuerza y han acompañado a la comitiva por el Paseo de Recoletos. Con este ya van dos años en que las protestas contra la gestión del presidente han protagonizado el desfile. La novedad ha sido el regreso de la bandera estadounidense al acto. En la anterior ocasión, el entonces líder de la oposición se negó a levantarse. Ahora, el presidente ha permanecido de pie a su paso, como todos los presentes.

El público presente en el desfile del día de la Hispanidad ha vuelto a abuchear al presidente. Entre silbidos, José Luis Rodríguez Zapatero ha saludado a las autoridades antes de situarse en la tribuna para presenciar el acto. Pero cuando abandonaba el lugar, los abucheos y gritos se han escuchado con más fuerza y han acompañado a la comitiva por el Paseo de Recoletos. Con este ya van dos años en que las protestas contra la gestión del presidente han protagonizado el desfile. La novedad ha sido el regreso de la bandera estadounidense al acto. En la anterior ocasión, el entonces líder de la oposición se negó a levantarse. Ahora, el presidente ha permanecido de pie a su paso, como todos los presentes.
(Libertad Digital) Los gritos empezaron a oírse nada más bajar José Luis Rodríguez Zapatero del coche oficial en el que se había desplazado hasta la madrileña plaza de Colón. Allí, entre silbidos, el jefe del Ejecutivo saludó al ministro de Defensa, José Antonio Alonso y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón.
 
El presidente del Gobierno llegó diez minutos antes de la llegada del desfile. Allí también estaban ya el Jefe del Estado Mayor de Defensa y Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad. La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, también ha acudido al acto con el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
 
 

Pocos minutos antes del comienzo del acto, llegaron los Reyes de España escoltados por la Guardia Real. Don Juan Carlos y Doña Sofía han sido recibidos entre aplausos. Han saludado a las autoridades madrileñas en el acto, además de al presidente del Gobierno, que les ha recibido nada más salir del vehículo. Además de los Reyes, han acudido al desfile los Príncipes de Asturias y las Infantas doña Elena y doña Cristina.
 
Tras los saludos, ha sonado el Himno Nacional. El Rey Juan Carlos, vestido con el uniforme de capitán general del Ejército de Tierra ha pasado revista después a las tropas junto al Jefe del Estado Mayor de la Defensa. Antes de situarse en la tribuna, la Familia Real ha saludado a los presidentes autonómicos presentes (faltaron Maragall, Rodríguez Ibarra, Camps, Barreda y Juan José Ibarretxe), a los miembros del Gobierno (con las ausencias de López Aguilar, Narbona y Magdalena Álvarez) y a las autoridades militares.
 
Desde el palco, los Reyes han presenciado una exhibición de la brigada paracaidista: tres soldados han descendido desde el aire justo frente a la tribuna principal. Con el izado de la bandera española y el tradicional homenaje a los militares que dieron su vida por España, ha comenzado el desfile en el que participan más 4.000 soldados, 206 vehículos y 82 aeronaves.
 
Un paracaidista desciende sobre la Plaza de ColónLas novedades de la parada militar este año son el estreno en un desfile de los reservistas voluntarios y de la Unidad Militar de Emergencias, y la presencia de la enseña estadounidense, que ha sido exhibida con los restantes países que lideran la Fuerza de la OTAN en Kosovo (KFOR). Esta vez, el presidente ha permanecido de pie al paso de la bandera, no como hizo en la anterior ocasión, hace ya dos años. En ese desfile, en el que Zapatero estuvo presente como líder de la oposición, el presidente permaneció sentado.
 
Al paso de la bandera de los Estados Unidos Zapatero permaneció en pie pero no le prestó demasiada atención, es más, en señal de desdén por la enseña norteamericana, procuró mirar hacia otro lado.
 
 
Con la bandera de EEUU, han desfilado las enseñas de Alemania, Francia, Italia, Suecia y Portugal. Entre otros invitados, se pudo ver en el acto a los embajadores de los Estados Unidos, Eduardo Aguirre, y de Israel, Víctor Harel. Al término del desfile militar, que concluyó pasadas las 12.00 horas, los Reyes han ofrecido una recepción en el Palacio Real a las personalidades invitadas a la celebración de la Fiesta Nacional. Cuando Zapatero abandonaba el lugar en el coche oficial, de nuevo se han escuchado las protestas del público, tanto a lo largo del Paseo de Recoletos por donde circulaba el vehículo como desde una de las tribunas de invitados.

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