L D (EFE) Olmert, al inaugurar este lunes el período de sesiones de otoño e invierno del Parlamento (Kneset), ofreció reunirse y comenzar a negociar la paz con Siniora, a quien llamó a "superar prejuicios" aunque agregó: "sé que no le será fácil". La iniciativa de paz de la Liga Árabe a la que se refirió Siniora exhorta a los países árabes a reconocer al Estado judío a cambio de que éste se retire de todos los territorios que consideran "ocupados" a dichos países.
Olmert, anunció, además, su decisión de reunirse "de inmediato" con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Abú Mazen, para negociar la paz entre los dos pueblos. La base para negociar será la "Hoja de ruta", el plan de paz para Oriente Medio diseñado por el Cuarteto de Madrid (Estados Unidos, la Unión Europea, Rusia y la ONU), y que adoptó la comunidad internacional. "Nosotros distinguimos claramente entre el Gobierno del Movimiento Islámico (Hamas), y el presidente Mazen", dijo el jefe del Gobierno israelí.
De este modo Olmert subrayó que los terroristas de Hamas se niegan a aceptar las exigencias de la comunidad internacional, como son poner fin al terrorismo, reconocer los acuerdos previos con el Estado de Israel, así como la propia existencia del Estado judío. "No queremos dominar eternamente al pueblo palestino. Me comprometo a aprovechar cualquier ocasión para negociar", dijo Olmert en su discurso durante la sesión inaugural del periodo invernal del Parlamento de Israel (Knesset).
En cuanto a Siria, que reclama a devolución de la meseta del Golán, que Israel conquistó en la Guerra de los seis día de 1967, Olmert rechazó los últimos ofrecimientos del presidente sirio, Bachar Al Asad, para reanudar las negociaciones de paz, estancadas desde 1999. "Quien quiere la paz no alberga en su país, como el Gobierno de Siria, a organizaciones terroristas", dijo Olmert en alusión a las organizaciones terroristas palestinas, como el mismo Hamas, cuyo dirigente en el exterior, Jaled Mashal, reside en precisamente en Damasco.
Sobre la oferta para negociar la paz con el primer ministro del Líbano, Fuad Siniora, a quien Olmert instó a "superar prejuicios" aunque, reconoció , "sé que no le será fácil". El jefe del Ejecutivo israelí dio a entender que el conflicto con los palestinos tendrá prioridad para su Gobierno durante el nuevo período de sesiones, en particular después de la reciente guerra con el grupo terrorista chií de Hizbulá en Líbano.
Israel "no está interesado en el sufrimiento del pueblo palestino y en la crisis en que se halla", dijo Olmert. "Por el contrario –insistió–, deseamos su prosperidad y la cooperación entre nuestros pueblos, pero son los palestinos quienes debe escoger qué desean", agregó con referencia a la radicalización del Gobierno palestino (controlado por Hamás) y a las luchas intestinas que los amenazan con una guerra civil. Olmert recalcó que Israel "está decidido a negociar con los palestinos pero sólo con dirigentes responsables", como es el caso del presidente Mazen, que –a diferencia del Gobierno de Hamas– acepta las exigencias de la comunidad internacional y la "Hoja de ruta".
El jefe de la oposición, Benjamín Netanyahu, líder del Partido derechista Likud, pidió al Gobierno que restablezca "el poder de disuasión de Israel frente a sus enemigos, y recupere el honor nacional", pues, afirmó, "nuestros enemigos se burlan públicamente de nosotros". "La amenaza atómica de Irán a Israel, tras la prueba nuclear hecha días atrás por Corea del Norte, que coopera con Teherán, me quema la sangre", dijo el jefe de la oposición. Olmert informó al Parlamento de que el supuesto plan atómico de Irán será uno de los temas centrales en las conversaciones que celebrará desde este martes en Rusia con el presidente, Vladimir Putin, y el mes próximo en Washington con el de EEUU, George W.Bush.
De este modo Olmert subrayó que los terroristas de Hamas se niegan a aceptar las exigencias de la comunidad internacional, como son poner fin al terrorismo, reconocer los acuerdos previos con el Estado de Israel, así como la propia existencia del Estado judío. "No queremos dominar eternamente al pueblo palestino. Me comprometo a aprovechar cualquier ocasión para negociar", dijo Olmert en su discurso durante la sesión inaugural del periodo invernal del Parlamento de Israel (Knesset).
En cuanto a Siria, que reclama a devolución de la meseta del Golán, que Israel conquistó en la Guerra de los seis día de 1967, Olmert rechazó los últimos ofrecimientos del presidente sirio, Bachar Al Asad, para reanudar las negociaciones de paz, estancadas desde 1999. "Quien quiere la paz no alberga en su país, como el Gobierno de Siria, a organizaciones terroristas", dijo Olmert en alusión a las organizaciones terroristas palestinas, como el mismo Hamas, cuyo dirigente en el exterior, Jaled Mashal, reside en precisamente en Damasco.
Sobre la oferta para negociar la paz con el primer ministro del Líbano, Fuad Siniora, a quien Olmert instó a "superar prejuicios" aunque, reconoció , "sé que no le será fácil". El jefe del Ejecutivo israelí dio a entender que el conflicto con los palestinos tendrá prioridad para su Gobierno durante el nuevo período de sesiones, en particular después de la reciente guerra con el grupo terrorista chií de Hizbulá en Líbano.
Israel "no está interesado en el sufrimiento del pueblo palestino y en la crisis en que se halla", dijo Olmert. "Por el contrario –insistió–, deseamos su prosperidad y la cooperación entre nuestros pueblos, pero son los palestinos quienes debe escoger qué desean", agregó con referencia a la radicalización del Gobierno palestino (controlado por Hamás) y a las luchas intestinas que los amenazan con una guerra civil. Olmert recalcó que Israel "está decidido a negociar con los palestinos pero sólo con dirigentes responsables", como es el caso del presidente Mazen, que –a diferencia del Gobierno de Hamas– acepta las exigencias de la comunidad internacional y la "Hoja de ruta".
El jefe de la oposición, Benjamín Netanyahu, líder del Partido derechista Likud, pidió al Gobierno que restablezca "el poder de disuasión de Israel frente a sus enemigos, y recupere el honor nacional", pues, afirmó, "nuestros enemigos se burlan públicamente de nosotros". "La amenaza atómica de Irán a Israel, tras la prueba nuclear hecha días atrás por Corea del Norte, que coopera con Teherán, me quema la sangre", dijo el jefe de la oposición. Olmert informó al Parlamento de que el supuesto plan atómico de Irán será uno de los temas centrales en las conversaciones que celebrará desde este martes en Rusia con el presidente, Vladimir Putin, y el mes próximo en Washington con el de EEUU, George W.Bush.