LD (EFE) La activista hizo estas afirmaciones en víspera del "Día de la Memoria", jornada en la que familiares de las víctimas de la represión soviética se congregan en todas las ciudades rusas para recordar a sus seres queridos. Memorial cifra en "más de doce millones los ciudadanos de la URSS represaliados", informa la agencia Interfax. Yemkova denunció que las autoridades no presten la debida atención a la rehabilitación de las víctimas, en su mayoría residentes en el Cáucaso norte, de donde Stalin deportó a pueblos enteros, y en la región de Krasnoyark (Siberia central). "El principal problema radica en que la traducción de las ventajas sociales en dinero en metálico ha perjudicado a las víctimas, protegidas según una ley adoptada hace hoy quince años", dijo.
Por ello, agregó, "la situación de las víctimas ha empeorado considerablemente. En Moscú y San Petersburgo su situación es mejor que en las regiones deprimidas de Rusia. Dos personas que estuvieron en el mismo Gulag, reciben compensaciones diferentes". Yémkova considera un grave error haber excluido de la legislación de rehabilitación el término "perjuicio moral", con lo que "resulta que no hubo represión".
Activistas y liberales participarán el próximo lunes en un acto conmemorativo en la plaza moscovita de Lubyanka, donde estaba emplazada la sede de la temida KGB, sucesora de la Cheka, los órganos de seguridad en tiempos soviéticos. En la ciudad de Vorónezh, 500 kilómetros al sur de Moscú, tendrá lugar una ceremonia de enterramiento de 144 víctimas de las represiones políticas soviéticas.
Por ello, agregó, "la situación de las víctimas ha empeorado considerablemente. En Moscú y San Petersburgo su situación es mejor que en las regiones deprimidas de Rusia. Dos personas que estuvieron en el mismo Gulag, reciben compensaciones diferentes". Yémkova considera un grave error haber excluido de la legislación de rehabilitación el término "perjuicio moral", con lo que "resulta que no hubo represión".
Activistas y liberales participarán el próximo lunes en un acto conmemorativo en la plaza moscovita de Lubyanka, donde estaba emplazada la sede de la temida KGB, sucesora de la Cheka, los órganos de seguridad en tiempos soviéticos. En la ciudad de Vorónezh, 500 kilómetros al sur de Moscú, tendrá lugar una ceremonia de enterramiento de 144 víctimas de las represiones políticas soviéticas.
Según datos de la Fiscalía General, las autoridades rusas estudiaron tras las caída de la URSS (1991) causas penales que implicaban a más de 900.000 víctimas de la represión, y rehabilitaron a 637.000 de ellas. Entre los casos de represión política que provocaron mayor resonancia en la sociedad soviética destacan el Patriarca de la Iglesia ortodoxa, Tíjon, el bailarín Rudolf Nureyév, el menchevique Broido y el científico Timoféyev. La represión política fue especialmente dura durante el mandato de Stalin (1922-53), pero ésta no se interrumpió a su muerte pese a la amnistía general decretada por el Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS).