L D (Europa Press) El auto de la juez de primera instancia e instrucción número 4 de Manresa concluye que el acusado no actuó en legítima defensa y que "no resulta arbitrario ni caprichoso" considerar que existe riesgo de fuga en el caso de Corominas, por la "gravedad de la pena" correspondiente al delito que se le imputa y por pertenecer a una familia de "gran nivel económico", pese a que en el recurso se trataba de desvincular la situación del imputado de la del resto de la familia.
Según la juez, "los únicos datos objetivos" son que Corominas vive "en la urbanización más selectiva de la comarca, que conducía un vehículo Mercedes de elevadísimo precio en el mercado y que, además, y pese a manifestar que sólo gana un sueldo de 1.500 euros mensuales, ofrece suficiente crédito a una entidad bancaria que, en sólo unos días, le ha concedido un préstamo por el importe nada despreciable de 150.000 euros", cantidad que el detenido ha depositado como fianza.
Respecto a la posiblidad de apreciar legítima defensa como circunstancia atenuante, el auto considera que "sería posible apreciarla" si la acción de Corominas "se hubiera dirigido contra algunos de los dos individuos que el día de los hechos en el interior de dicha finca", pero "no desde el momento en que se dirigió de forma consciente hacia el vehículo Renault Megane estacionado en la vía pública, a bastantes metros de distancia de la vivienda de los señores Tous y sin existir ninguna causa objetiva que lo justificase disparó hacia sus ocupante".
Se alega además que la inspección ocular del Megane "arrojó un dato concluyente: la inexistencia de arma de fuego alguna en su interior que pudiera haber sido portada por ninguno de los dos ocupantes" y "mucho menos esgrimida" contra Corominas, quien en su declaración afirmó que vio un arma en las manos del conductor.