(Libertad Digital) El Gobierno tiene sobreocupados sus centros de acogida en Canarias. De los cerca de 900 inmigrantes ilegales que llegaron a las islas durante 2006, tan sólo ha conseguido trasladar a 242 hasta otras comunidades autónomas, que ya han advertido de que también tienen sus centros de acogida saturados y sólo se comprometen a asignar 31 plazas más. Esto quiere decir que más de 600 menores siguen todavía en las islas, donde sólo hay sitio ya para un máximo de 300.
Según informa el diario La Razón, estas son algunas de las cifras sobre política migratoria en 2006 que el Gobierno ha remitido a las distintas administraciones públicas para su discusión este jueves en la III Conferencia de Presidentes.
Ante esta urgente situación, el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero ha pedido auxilio a la Iglesia por boca de la vicepresidenta primera del Gobierno, que reconoció que se están buscando "líneas de trabajo" para la acogida de estos menores. María Teresa Fernández de la Vega, más concretamente, dijo: "Estamos buscando una colaboración en un tema muy sensible que es el de acogimiento y atención a los menores. Ya hemos acordado algunos elementos y vamos a continuar una línea de trabajo en esta materia".
El rotativo añade que la vicepresidenta sabe que las comunidades autónomas han hecho un gran esfuerzo de acogida, pero dijo que "no es suficiente, tiene que ser mayor y es por ello por lo que estamos buscando todas las vías sociales que podamos para abordar este problema tan serio". Para esta cuestión, De la Vega sí alabó la "importantísima labor" de la Iglesia y las ONG que reciben financiación del Estado.
Aun así, desde la Conferencia Episcopal se matizó que de las afirmaciones de la vicepresidenta "no se puede deducir que se vaya a firmar un acuerdo marco sobre este tema", aunque sí se confirmó que el Ejecutivo "ha sondeado y ha pedido ayuda" a la Iglesia para la guarda de estos menores inmigrantes, algo para lo que la predisposición de la Iglesia siempre "ha sido muy positiva". La realidad es que una buena parte de los centros de acogida de menores en España están gestionados por las diócesis, Cáritas y órdenes religiosas: "¿Cómo vamos a decir que no acogemos a menores, si siempre lo hemos hecho?".
La Conferencia Episcopal ha explicado que "el Ejecutivo ya ha tenido conversaciones con varios obispos para intentar concretar esta colaboración", pero han dejado claro que "ni se ha negociado ni se ha firmado nada, aunque se ha mostrado una total disposición a colaborar en un tema tan sensible como la inmigración, independientemente del partido que esté en el Gobierno". Por encima de todo, desde la Iglesia se ha recordado que ellos se hacen cargo de los menores, pero la tutela le corresponde siempre al Estado.