L D (EFE) No obstante, el entrenador español, que siempre ha destacado el carácter irreductible de sus pupilos, se mostró un tanto preocupado por el hecho de que hasta que el encuentro no estuvo realmente "complicado", el equipo nacional no acabó de meterse plenamente en el choque. "Este es un equipo que tiene mucha confianza en sí mismo, pero hay que tratarlo de hacerlo bien desde el principio, porque hasta que no lo hemos visto del todo complicado no hemos apretado, y no debemos dejarlo todo para el final, porque este torneo es un camino de largo recorrido y hoy nos hemos castigado", añade el seleccionador.
Pese a todo, Juan Carlos Pastor se muestra convencido de la mejoría de la selección en sus próximos compromisos, convencido de que las dificultades de hoy, son consecuencia, en gran medido, de los nervios e imprecisiones que siempre acompañan en todo partido inaugural. "Ha sido un partido duro, difícil, como ya preveíamos, además el inicio de un gran campeonato nunca es fácil, porque estas obligado a ganar, porque tienes que romper el hielo, aunque tampoco podemos negar que no hemos empezado bien", explica el entrenador.
Un mal comienzo en parte propiciado por el excelente juego del conjunto norteafricano, con Zaky y El Ahmar como puntas de lanza, un equipo que a juicio de Pastor puede crear muchas dificultades en la segunda fase del torneo, "si es que finalmente se clasifica". "Egipto ha jugado un gran partido, ha estado serio en ataque, sin cometer errores, y muy agresivo en defensa, será un equipo, que si finalmente se clasifica para la segunda ronda, creará muchas dificultades", comenta el seleccionador, que recordó el reciente triunfo de los egipcios sobre la anfitriona, Alemania (29-30).
Victoria que los norteafricanos a punto estuvieron de repetir ante España de no ser, como afirmaba el técnico egipcio, el serbio Zoran Zivkovic, por los diez últimos minutos, en los que el preparador ha dicho que sus pupilos fueron incapaces de frenar al pivote español Rolando Uríos. Circunstancia a la que Juan Carlos Pastor añade el cansancio acumulado por los egipcios, sin apenas rotaciones, que les impidió mantener en el tramo final del choque la misma efectividad que en los primeros minutos del encuentro. "Han acusado el cansancio, han tenido que hacer un gran esfuerzo en cada ataque con esas fintas y esas penetraciones y eso luego al final se paga, porque no debemos olvidar que los encuentros duran sesenta minutos", concluyó Pastor.
Pese a todo, Juan Carlos Pastor se muestra convencido de la mejoría de la selección en sus próximos compromisos, convencido de que las dificultades de hoy, son consecuencia, en gran medido, de los nervios e imprecisiones que siempre acompañan en todo partido inaugural. "Ha sido un partido duro, difícil, como ya preveíamos, además el inicio de un gran campeonato nunca es fácil, porque estas obligado a ganar, porque tienes que romper el hielo, aunque tampoco podemos negar que no hemos empezado bien", explica el entrenador.
Un mal comienzo en parte propiciado por el excelente juego del conjunto norteafricano, con Zaky y El Ahmar como puntas de lanza, un equipo que a juicio de Pastor puede crear muchas dificultades en la segunda fase del torneo, "si es que finalmente se clasifica". "Egipto ha jugado un gran partido, ha estado serio en ataque, sin cometer errores, y muy agresivo en defensa, será un equipo, que si finalmente se clasifica para la segunda ronda, creará muchas dificultades", comenta el seleccionador, que recordó el reciente triunfo de los egipcios sobre la anfitriona, Alemania (29-30).
Victoria que los norteafricanos a punto estuvieron de repetir ante España de no ser, como afirmaba el técnico egipcio, el serbio Zoran Zivkovic, por los diez últimos minutos, en los que el preparador ha dicho que sus pupilos fueron incapaces de frenar al pivote español Rolando Uríos. Circunstancia a la que Juan Carlos Pastor añade el cansancio acumulado por los egipcios, sin apenas rotaciones, que les impidió mantener en el tramo final del choque la misma efectividad que en los primeros minutos del encuentro. "Han acusado el cansancio, han tenido que hacer un gran esfuerzo en cada ataque con esas fintas y esas penetraciones y eso luego al final se paga, porque no debemos olvidar que los encuentros duran sesenta minutos", concluyó Pastor.