(Libertad Digital) Aún sin estar al cien por cien, Eto'o ha devuelto al Barça la filosofía ofensiva que le ha hecho ganarlo prácticamente todo las dos últimas temporadas: movilidad, agresividad, velocidad, ambición y, sobre todo, hambre de gol. Las ganas del africano contagiaron al equipo y también a la grada del Camp Nou, ávida de paladear no sólo buen fútbol, sino también una contundente victoria de los suyos para olvidar cuanto antes el desastre ante el Liverpool.
El Athletic asistió al festival del camerunés casi sin inmutarse, e incluso contribuyó al espectáculo con un gol en propia meta, marcado por Amorebieta, y al permitir las internadas de los jugadores azulgranas sin dar una sola patada. Con una defensa adelantada y un centro del campo poblado de efectivos, el equipo de Mané aguantó lo que pudo. Blando atrás e inocente delante, lo porfió todo al talento de un intermitente Yeste y al remate de Urzaiz, el único que inquietó a Valdés en la primera parte con un cabezazo que se marchó desviado a la media hora de juego. Fue justo después de que llegara el 2-0, obra de Xavi, quien fusiló a Aranzubia tras una dejada del 'nueve' azulgrana. Y el propio Eto'o redondeó su buena actuación en la primera mitad al definir en un mano a mano con el meta del conjunto bilbaíno tras recibir una asistencia de Ronaldinho.
El Athletic asistió al festival del camerunés casi sin inmutarse, e incluso contribuyó al espectáculo con un gol en propia meta, marcado por Amorebieta, y al permitir las internadas de los jugadores azulgranas sin dar una sola patada. Con una defensa adelantada y un centro del campo poblado de efectivos, el equipo de Mané aguantó lo que pudo. Blando atrás e inocente delante, lo porfió todo al talento de un intermitente Yeste y al remate de Urzaiz, el único que inquietó a Valdés en la primera parte con un cabezazo que se marchó desviado a la media hora de juego. Fue justo después de que llegara el 2-0, obra de Xavi, quien fusiló a Aranzubia tras una dejada del 'nueve' azulgrana. Y el propio Eto'o redondeó su buena actuación en la primera mitad al definir en un mano a mano con el meta del conjunto bilbaíno tras recibir una asistencia de Ronaldinho.
Ni siquiera el 3-0 con el que el Athletic se fue al descanso sirvió para 'picar' el orgullo de un conjunto que, de jugar como lo hizo esta vez, peleará hasta el final para eludir el descenso y que en la segunda mitad sufrió todavía más de lo que lo hizo en la primera, pese a no encajar ningún gol más. Un pletórico Iniesta protagonizó la primera jugada de peligro tras la reanudación: una combinación con Giuly que acabó con un disparo al palo del centrocampista albaceteño, quien pudo aprovechar el rechace, pero acabó enviando el balón a las nubes en su segunda opción. Ronaldinho, muy motivado después de que se especulara durante toda la semana con su bajo estado de forma y su presunto problema de sobrepeso, también quiso unirse al festival.
El 'crack' brasileño estuvo a punto de marcar en una jugada personal en la que culebreó con el balón cosido a los pies hasta sortear a tres rivales y lanzar una vaselina escorada que acabó besando el larguero de una Aranzubia batido. Ya con Eto'o en el vestuario -Rijkaard lo sustituyó por Messi para que recibiera la ovación del público- 'Dinho' acaparó todo el protagonismo azulgrana sobre el terreno de juego. Con un poco más de acierto, el Ronaldinho de la segunda parte podría haber añadido a su cuenta dos o tres tantos más, pero el acierto de Aranzubia y, de nuevo el travesaño, lo evitaron. Al final, el Athletic, cuyo único recurso en la segunda mitad fue colgar cuatro o cinco balones al área de Valdés, pudo llevarse una goleada de escándalo, pero el marcador no se movió.
Ficha técnica del partido El 'crack' brasileño estuvo a punto de marcar en una jugada personal en la que culebreó con el balón cosido a los pies hasta sortear a tres rivales y lanzar una vaselina escorada que acabó besando el larguero de una Aranzubia batido. Ya con Eto'o en el vestuario -Rijkaard lo sustituyó por Messi para que recibiera la ovación del público- 'Dinho' acaparó todo el protagonismo azulgrana sobre el terreno de juego. Con un poco más de acierto, el Ronaldinho de la segunda parte podría haber añadido a su cuenta dos o tres tantos más, pero el acierto de Aranzubia y, de nuevo el travesaño, lo evitaron. Al final, el Athletic, cuyo único recurso en la segunda mitad fue colgar cuatro o cinco balones al área de Valdés, pudo llevarse una goleada de escándalo, pero el marcador no se movió.
FC Barcelona, 3: Valdés; Oleguer, Puyol, Thuram, Van Bronckhorst; Edmilson (Sylvinho, m.82), Xavi, Iniesta; Giuly (Saviola, m.78), Ronaldinho y Eto'o (Messi, m.66)
Athletic Club de Bilbao, 0: Aranzubia; Expósito, Amorebieta, Sarriegi (Bergara, m.77), Casas; Iraola, Murillo (Aduriz, m.46), Javi Martínez; Yeste, Gabilondo; y Urzaiz (Llorente, m.53)
Goles: 1-0, m.22: Amorebieta, en propia meta; 2-0, m.29: Xavi; 3-0, m.40: Eto'o
Árbitro: Lizondo Cortés (Colegio valenciano). Mostró tarjeta amarilla al visitante Bergara (m.88)
Incidencias: Partido correspondiente a la vigésima cuarta jornada de Liga en Primera División disputado en el Camp Nou ante 64.804 espectadores