L D (Europa Press) El entrenador dijo que "después de no jugar bien era más fácil decir que lo que interesaba era el resultado, pero me gusta decir la verdad y habría sido importante haber podido rematar el partido". "Estoy contento porque nos interesaba ganar, pero tuvimos la posibilidad, con una afición que estaba volcada, de hacerlo un poco mejor", consideró antes de comenzar a negar todas las hipotéticas filtraciones que han existido en las últimas horas.
En primer lugar, sobre el supuesto malestar de Fernando Torres en el equipo rojiblanco y su posible salida. "Tengo una conversación privada con Torres en la que hablamos de fútbol y en esos temas no habla nada de nada del Atlético de Madrid. Será la palabra de quien sea contra la mía, pero no quisiera seguir en ese tema porque lo que me interesa es el partido". "También se dice que salió lo de la viagra, pero me refería a Ufarte y es una broma que no tiene nada que ver con el equipo. Después que los capitanes hablaron y muchas cosas que la mayoría han sido mentira. Las críticas pueden ser lo agrias que sean, pero es mentira", recalcó.
Así, aseguró que durante la charla del domingo nadie le dijo que se había equivocado con los cambios. "Máteme usted, pero no mienta. He recibido crítica agria, fuerte y no he dicho nunca nada, pero si mienten, sí. Decir que si los jugadores me dijeron de los cambios... no hay nada de nada, es todo mentira. No sé si tendrán sus confidentes, pero están equivocados", reiteró. "Yo no tengo la llave de nada y aprendo de los periodistas, de los aficionados y más de los jugadores si me dicen alguna cosa concreta. No me ha dicho ningún jugador nada de eso, ni de malas ni de buenas. La única verdad es que han dicho: 'Mister, por lo menos se ha ganado' y eso es verdad", añadió, destacando que nota que los futbolistas están con él y también que se encuentran "tensos, pero por ganar y clasificarse".
Personalmente, y sin entrar en si lo han comentado o no los jugadores, Aragonés aseguró no "arrepentirse" de lo que hizo el sábado. "Igual que cuando tengo la culpa lo digo, creo que el otro día, el contrario elige pegar pelotazos y eso nos obliga a ir hacia atrás", explica, destacando que él no echó al equipo hacia atrás.
Por otra parte, explicó que sus valoraciones hacia Xabi Alonso eran una elogio a su calidad porque cree que "un jugador pierda, siendo extraordinario, las pelotas que ha perdido". "Es un piropo, no pierde en un partido más de tres y el otro día perdió más. Ha jugado muy bien, trabaja impresionantemente bien y esos son los jugadores que queremos los entrenadores", indicó.