L D (EFE) El Departamento de Defensa, sin embargo, no vincula el despliegue de estas tropas de la Guardia Nacional, formada por soldados a tiempo parcial con el aumento de fuerzas en Bagdad ordenado por el presidente George W. Bush a principios de 2007.
El día 10 de enero, Bush pronunció el discurso "A New Way Forward" (Un nuevo camino por delante) en el que apostaba por un incremento de tropas sobre el terreno como medida indispensable para estabilizar el avispero iraquí.
En el comunicado, se escribe que una de las unidades se desplegará en diciembre y el resto en 2008. Entorno a un tercio de la Guardia Nacional volverá a Irak antes de lo previsto en los objetivos y se prevé que permanecerán en sus respectivos estados cinco años por cada año de despliegue en el exterior.
En el caso de las tropas regulares, el objetivo es que puedan permanecer en sus destinos habituales dos años por cada uno que pasen en zonas de combate.
El Departamento de Defensa indicó que la alerta de despliegue se ha difundido en estas fechas para que esos efectivos puedan "contar con el máximo tiempo posible para hacer sus preparativos" antes de partir.
El anuncio coincide con el pulso entre el presidente de EEUU y el Congreso acerca de dos proyectos de ley que vinculan la asignación de fondos para la Guerra en Irak y Afganistán al establecimiento de un calendario para la retirada de las tropas del país árabe; mientras que Bush los rechaza.