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Magdalena Álvarez acusa ahora a Esperanza Aguirre de querer suplantar al Gobierno en la inauguración de la T-4

La pasada semana, la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, puso la primera piedra de la estación de Cercanías en la T-4 de Barajas, acompañada por los candidatos socialistas al Ayuntamiento y la Comunidad, Miguel Sebastián y Rafael Simancas. Fue el día antes de que Esperanza Aguirre inaugurara el metro que lleva hasta allí, una infraestructura sobre la que Álvarez ha reconocido que ni es su competencia "ni lo hemos construido". Este miércoles la ministra ha salido acusando a Esperanza Aguirre de querer suplantar al Gobierno en la inauguración de la estación de cercanías.

La pasada semana, la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, puso la primera piedra de la estación de Cercanías en la T-4 de Barajas, acompañada por los candidatos socialistas al Ayuntamiento y la Comunidad, Miguel Sebastián y Rafael Simancas. Fue el día antes de que Esperanza Aguirre inaugurara el metro que lleva hasta allí, una infraestructura sobre la que Álvarez ha reconocido que ni es su competencia "ni lo hemos construido". Este miércoles la ministra ha salido acusando a Esperanza Aguirre de querer suplantar al Gobierno en la inauguración de la estación de cercanías.
LD (Europa Press) Hay dos infraestructuras y dos inauguraciones, todas en la Terminal 4 de Barajas. El martes de la semana pasada, Magdalena Álvarez inauguró la estación de Cercanías, sufragada por Fomento, mientras que al día siguiente Esperanza Aguirre hizo la inauguración de la estación de Metro, una infraestructura que no es competencia del Gobierno central "ni lo hemos construido", según reconoció la propia Magdalena Álvarez. Mientras que de la estación de Cercanías se puso la primera piedra, Esperanza Aguirre celebró la inauguración del Metro, que se puso en funcionamiento el pasado jueves.
 
En respuesta al Grupo Popular en el Senado, Álvarez ha asegurado que, si bien el proyecto de Cercanías fue iniciado por el Gobierno del PP, siendo entonces ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, finalmente fue acabado por el actual Gabinete. Por ello, Álvarez quiso dejar claro que, dado que la inversión realizada (hasta 26 millones de euros) ha sido obra del Ministerio de Fomento, a través de AENA, y en ningún caso de la Comunidad de Madrid. Y por ello, la polémica inauguración debía haber corrido a cargo del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, o de la propia ministra, y que "Aguirre no tiene ningún título para inaugurar la estación".
 
La ministra de Fomento precisó que éste es el "argumento" por el cual acudió a la estación intermodal en la víspera de su inauguración formal, y lo utilizó para calificar a los populares de "tironeros de la política española".
 
Por su parte, el senador del Grupo Popular, Germán Beteta, culpó a la ministra de haber realizado una "pseudoinauguración". Ha defendido a la inauguración oficial, recordando que la estación de metro es iniciativa de la Comunidad de Madrid, es su competencia, y ha sufragado en su totalidad su construcción. Además, ha defendido la autoría de los populares en la construcción de la estación de Metro de la T-4, debido, aseguró, a "la actuación cero del Gobierno".
 
Asimismo, ha acusado al Gobierno de reducir sus inversiones en Madrid y ha arremetido también contra los candidatos a la Comunidad de Madrid y la alcaldía de la capital, Rafael Simancas y Miguel Sebastián, respectivamente, que acompañaron a la ministra el día de la "falsa inauguración", a los que califica de "malos actores" de un "sainete esperpéntico".

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