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Rusia y el Reino Unido al borde de un enfrentamiento diplomático por el caso Litvinenko

El caso del asesinato del ex espía ruso Alexandr Litvinenko está a punto de provocar un enfrentamiento diplomático y judicial entre Rusia y el Reino Unido. Inmediatamente después de que la Fiscalía británica anunciara que tiene pruebas de que Andrei Lugovoi, empresario y antiguo colaborador de los servicios de seguridad de Moscú, está implicado en el crimen, la representante oficial de la Fiscalía rusa confirmaba la postura adelantada meses antes por su jefe, el general Yuri Chaika: no se extraditará Lugovoi porque la Constitución no contempla esa figura. Un portavoz de Downing Street subrayó que su Gobierno considera "grave" el caso y espera una respuesta de las autoridades rusas. Margaret Beckett, la ministra de Exteriores, declaró a la prensa que espera la "plena cooperación" rusa.

El caso del asesinato del ex espía ruso Alexandr Litvinenko está a punto de provocar un enfrentamiento diplomático y judicial entre Rusia y el Reino Unido. Inmediatamente después de que la Fiscalía británica anunciara que tiene pruebas de que Andrei Lugovoi, empresario y antiguo colaborador de los servicios de seguridad de Moscú, está implicado en el crimen, la representante oficial de la Fiscalía rusa confirmaba la postura adelantada meses antes por su jefe, el general Yuri Chaika: no se extraditará Lugovoi porque la Constitución no contempla esa figura. Un portavoz de Downing Street subrayó que su Gobierno considera "grave" el caso y espera una respuesta de las autoridades rusas. Margaret Beckett, la ministra de Exteriores, declaró a la prensa que espera la "plena cooperación" rusa.
LD (EFE) La representante oficial de la Fiscalía de Rusia, Marina Grídneva, anunció que el organismos judicial al que pertenece no extraditará al empresario y ex agente de seguridad Andrei Lugovoi, contra el que la Justicia británica adelantó que presentará cargos por el asesinato en Londres del antiguo espía ruso Alexandr Litvinenko.
 
Grídneva confirmó la postura adelantada desde hace meses por el fiscal general de su país, Yuri Chaika, de que la Constitución de Rusia no permite la extradición de sus ciudadanos a otros países. Por ello, Lugovoi, de 41 años, está "blindado" contra un proceso de esa índole.
 
El ex agente, quien se reunió hasta en cuatro ocasiones con Litvinenko en Londres entre mediados de octubre y el día de su hospitalización, ha negado en entrevistas a medios rusos y extranjeros su implicación en el asesinato y que esté protegido por el Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB, ex KGB). "Es una mentira", dijo al canal ruso REN-TV durante una entrevista en la que agregó que no da crédito a las versiones sobre la posible implicación de los servicios secretos rusos o de algún otro país en el asesinato de Litvinenko
 
Andréi Romashov, abogado de Lugovói, rehusó por su parte comentar el anuncio de la Fiscalía británica de que tiene pruebas suficientes para presentar cargos contra su cliente. "No hemos recibido notificación, ni verbal ni escrita, de que a mi cliente le hayan presentado cargos en relación a ese caso", dijo en declaraciones a la agencia de noticias rusa Interfax.
 
En Londres, un portavoz de Downing Street, residencia oficial del primer ministro Tony Blair, señaló que el Gobierno británico considera "grave" el asesinato de Litvinenko.b "Nadie debería tener duda alguna de la seriedad con que tratamos este caso. Asesinato es asesinato y, por tanto, es muy serio y la naturaleza de este asesinato es también muy seria", dijo la fuente.
 
Asimismo, Downing Street añadió que el embajador ruso en Londres, Yuri Fedotov, fue citado la mañana de este martes al Ministerio británico de Exteriores para reunirse con un representante diplomático que le manifestó la posición del Reino Unido y su exigencia para que Rusia cumpla con las peticiones legales para la extradición de Lugovoi. Antes, la ministra británica de Exteriores, Margaret Beckett, había indicado a la prensa que espera la "plena cooperación" de Rusia para que Lugovoi pueda ser procesado en Londres.
 
El portavoz de Downing Street no quiso hacer comentario alguno sobre cuál será la reacción del Gobierno de Londres si la administración de Vladímir Putin rechaza entregar a Lugovói. "Dejarnos tratar primero con el proceso legal. Dejad que el proceso legal siga su curso", añadió y recordó que ambos países tienen vínculos políticos y económicos aunque dejó claro que el derecho internacional debe ser respetado.

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