Harían todos (especialmente el PSOE, pero también los demás) un favor a la ciudadanía si cancelasen el esperpento de comisión de investigación de la Asamblea de Madrid y se convocasen cuanto antes nuevas elecciones.
El PSOE, aunque encuentre en falta a un compareciente o tenga una remota sospecha, no posee ningún dato, ninguna información, ningún indicio para seguir sosteniendo la tesis de la “trama” organizada por el PP para que Tamayo y Sáez huyeran de la Asamblea. Es un espectáculo bochornoso ver a los representantes de tan importante partido yéndose machaconamente por las ramas para zaherir al PP sin avanzar un paso, como si la comisión fuera el escenario de absurdos debates preelectorales. Y es aún más bochornoso que, para ello, utilice datos privados, que además nada demuestran, conseguidos por medios ilegales. Que lo deje ya, que limpie su casa, que cambie la lista y se enfrente a unas nuevas elecciones.
La tesis del PP –que se trata de una batalla interna de reparto de poder en la Federación Socialista Madrileña– tiene más verosimilitud, pero es una tesis política que deberían dejar, en todo caso, para otro momento. Y todo lo demás, si hay pruebas, que lo lleven a los tribunales. Porque también resulta un tanto vergonzoso que, para criticar a la FSM restante se tenga que dar crédito y altavoz a la FSM huida o expulsada que, si hubo batallas por el ladrillo y el poder, en ella estaban como sus compañeros de partido. Ya sabemos que el PP quiere elecciones. Que insista en ello.
IU es mejor que se retire del esperpento. Está dando tan mala imagen, ha metido a su pretendido socio en un berenjenal de tal naturaleza, que haría muy bien, para evitar su desaparición, en terminar cuanto antes.
Así que ya está bien. Elecciones cuanto antes.
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