Según informaba el periódico ABC, Agustín Remesal va a sustituir a Ángela Rodicio en la corresponsalía de TVE en Oriente Medio. Coincidiendo con el final de la auditoría interna que ha llevado a cabo la cadena pública para aclarar las cuentas de Rodicio, se cierra el paréntesis de la adjudicación de la corresponsalía con una solución que suena a huir de todo riesgo.
Agustín Remesal ha sido una persona a la que no le han faltado puestos de responsabilidad, ni ciertas canonjías a lo largo de todas las etapas de TVE. Persona de talante amable y pausado, ha estado en Paris, Nueva York o Lisboa, y tan pronto lo hemos visto con información cultural como en Hispasat. Probablemente, en estos momentos, estaba sin destino y Alfredo Urdaci lo ha mandado a ocupar un puesto que no es ningún chollo para una persona que ya no es tan joven, pero que, por su experiencia, no intentará sacar los pies del plato, ni buscará enfrentamientos en la línea informativa.
Con la caída de Ángela Rodicio que, según todos los indicios, tenía mayor debilidad por las marcas occidentales de ropa y complementos que por la indumentaria islámica, TVE se ha librado de un peón incómodo. La indómita Rodicio, para la que tuvo palabras demoledoras su ex compañero Arturo Pérez-Reverte, apenas ha podido ofrecer algún argumento que sirviera a los que querían presentar su destitución como una cuestión política. Por otra parte, lo que se ha podido entrever de la forma de relacionarse con sus colegas no le ha deparado demasiados amigos entre la profesión. Pocos darán la cara por ella.