A propósito del Foro Social de Bombay, aseguró José Vidal-Beneyto que la India es "un paraíso económico y un infierno social".
Si entendemos por "social" la sociedad, interpretación que no parece muy violenta, la expresión de don José sólo se aplicaría a regímenes dictatoriales, donde cabe concebir que el PIB del país aumente y el bienestar de la mayoría de la sociedad se hunda. Don José podría haber seleccionado algunos ejemplos del comunismo, con perdón.
En los países que respetan algo las instituciones de la sociedad abierta, en cambio, el crecimiento económico suele elevar el bienestar social, conforme a casi cualquier indicador de "desarrollo humano".
Y eso también sucede en la India que, para no disimulado disgusto de los pseudoprogresistas, es un país que está prosperando. El señor Vidal-Beneyto nos dice que no, y como prueba indica que más de la mitad de la población vive con menos de un dólar por día; lo que no se le ocurre (dejando aparte sutilezas de la paridad del poder adquisitivo) es preguntarse con cuánto vivían antes.
Sospecho que cuando el pensamiento único declama sobre lo "social" en realidad está diciendo "socialista", es decir, está hablando de las características antiliberales que aplaude. Creo que don José reprocha a las autoridades indias que estén haciendo por fin algunas cosas bien. Por cierto, entre esas cosas –por las que don José las llama ultraliberales fundamentalistas- se cuenta el "limitar los recursos del Foro a las aportaciones privadas". Caramba, otro mundo es posible.