El espanto, el asco y los mensajes de condena del genocidio de este 11-M en Madrid, perpetrado casi con toda seguridad por ETA, son la nota dominante en la inmensa mayoría de las bitácoras extranjeras de un extremo al otro del planeta.
En nuestro repaso por la blogosfera internacional nos detendremos en algunas bitácoras que, además de este gesto de repulsa unánime, ofrecen un análisis interesante de lo ocurrido. Es de destacar que en la mayoría de webs norteamericanas, sus autores se decantan por la tesis de que es Al Qaeda la que está detrás de los atentados. Pero aún así, hay matices interesantes que reseñar.
Por ejemplo, Mark Steyn destaca en su famosa bitácora que el objetivo del terrorismo no es arrancar concesiones parciales del mundo occidental, sino directamente su destrucción. “Como Hussein Massawi, ex-líder de Hezbollah, cuidadosamente explicaba; “Nosotros no luchamos para que ustedes nos ofrezcan algo. Nosotros luchamos para eliminarles”. (…) Y por “ustedes”, esta gente no se refiere únicamente a los arrogantes cowboys tejanos, sino a cualquier sociedad pluralista –desde un tranquilo lugar turístico como Bali a una moderna nación musulmana como Turquía o –como ocurrirá algún día- un pantano de cínico apaciguamiento como Francia”.
En otra bitácora, esta vez noruega, el autor ofrece también un interesante punto de vista acerca del mimetismo siniestro entre ETA y Al Quaeda. “La fundación European Security Advocacy Group, ha empezado a publicar anuncios contra el terrorismo en periódicos europeos, incluidos los más importantes de Noruega. El mensaje es que los europeos no estamos a salvo del terrorismo.
(…) Lo único inusual es que ha ocurrido en Europa Occidental, pero incluso esto no debería sorprendernos. Si Al-Qaeda es responsable, este no es su primer intento. Varios complots de Al Qaeda en Europa han sido abortados a lo largo de los últimos años, y algunos, como el que iba dirigido contra el Campeonato Mundial de Fútbol de 1998, en Francia, podría haber sido tan sangriento como éste de ahora. Si por otro lado, ETA es la responsable, sería la primera vez que hace algo de este tamaño, pero es difícil sorprenderse de que hayan aprendido el poder del terrorismo a gran escala. El hecho ha sido fuertemente publicitado y la atención está garantizada. Y uno debe estar al día en los tiempos que corren. Al Qaeda ha causado una inflación en el campo del terrorismo. Un moderno ataque terrorista debe ser más mortífero y mejor ejecutado que cualquier otro que sirviera para el mismo propósito diez años atrás”.
En ésta otra bitácora se especula con una teoría que probablemente sea la más cercana a la verdad. “ETA coloca las bombas –éste ha sido claramente un trabajo al estilo de ETA- pero intenta que parezca un atentado de Al Qaeda, o al menos crear la sospecha tanto como puedan –observen que la primera persona en aludir a una conexión de la “resistencia árabe” en la masacre de Madrid no ha sido otro que el vocero de ETA, Arnaldo Otegui. Su estrategia: echar al pueblo contra Aznar y el PP, sus enemigos declarados, por ponernos en el punto de mira de Al Quaeda. Una terriblemente estrecha y egoísta actitud: “Aznar y Bush tienen a todas esas personas asesinadoas por atreverse a usar la fuerza para parar el terrorismo. Mucha gente haría suya esta actitud y castigaría al PP en las elecciones del domingo hasta incluso hacerles perder. Esto es algo que a ETA le encantaría ver.
Yo sigo convencido de que ETA está detrás de estas bombas”.
Y aunque después de lo ocurrido el asunto tenga una importancia relativa, hay una imagen que ha llamado la atención de muchos weblogers fuera de nuestro país que no podemos dejar de reseñar. “En una demostración española de protesta contra los ataques terroristas de ayer, encontramos un ejemplo perfecto de la enfermiza hipocresía que está envenenando a Europa, como el tonto útil del gorro de lana que orgullosamente se alinea con el símbolo del terrorismo palestino”.
Y hablábamos al principio de genocidio para referirnos a los atentados del 11-M, puesto que este delito contra la humanidad, tal y como lo define el Tribunal Penal Internacional incluye el intento de destruir total o parcialmente a un grupo nacional; y las más de 1.500 víctimas de este atentado genocida, han sufrido este atentado precisamente por su condición de ciudadanos de un país libre y democrático, por su condición de españoles. Desde aquí, modestamente brindamos esta idea a los representantes de la cultura que últimamente muestran un encomiable interés en este tipo de cuestiones penales. Este sí es un buen motivo.