Todo el mundo estará al corriente del arresto, en el sur de Francia, de Miguel Antza y Anboto, dirigentes de la banda terrorista ETA, de una veintena de sus cómplices y de la incautación de un importante arsenal de armas. Una buena noticia. Como algunos pretenden que es un éxito de la policía francesa, y otros de la policía española, preciso es señalar que es un éxito de la colaboración entre ambas policías. Sin las informaciones de nuestra Guardia Civil nada hubiera sido posible, pero son los servicios franceses antiterroristas quienes han llevado a bien la redada.
El fracaso de la cínica estafa del diputado de la UMP, Didier Julia y de su cómplice Philippe Brett (ex comando de la marina, ex guardaespaldas), que llegaron a pretender que estaban a punto de liberar a los dos periodistas rehenes, y Brett, en una ocasión llegó hasta afirmar por teléfono, que estaba junto a los rehenes y que se disponían a salir para Siria. Se ha demostrado que todo era mentira, que ni Julia, ni Brett, estuvieron en Bagdad en esta ocasión, que no salieron de Siria, durante los cuatro días de sus "negociaciones" inventadas. Sus mentiras puestas de manifiesto, se aferraron a ellas, declarando que las operaciones militares norteamericanas en la región fueron las que lo echaron todo a perder. Por lo visto, en Irak, es relativamente fácil secuestrar, torturar, decapitar rehenes, y también liberar a otros, como ha ocurrido recientemente, salvo en el caso de los dos periodistas franceses. Tardíamente, este fin de semana, el gobierno ha reaccionado con irritación, y amenaza con sanciones, ante esta cínica estafa. Si hubo algo de desconcierto al principio, posiblemente fue porque se sabe que Julia y Brett, forman parte del potente lobby proiraquí francés. (Presidente de Honor: Jacques Chirac). Fueron amigos entusiastas de Sadam Hussein, y ahora de la "resistencia" antiyanqui. La prensa gala afirma ahora que todo ha sido una provocación de los servicios secretos sirios, y que Julia y Brett, les sirvieron de peleles. Mientras tanto los rehenes siguen detenidos.