En varias ocasiones me han preguntado si tengo dificultad para encontrar una tontería económica todas las semanas. En realidad, la única dificultad que enfrento es seleccionar una sola. Como muestra, aquí van cinco que quedaron fuera en diciembre, y añado esta vez sólo las claves de lo que iban a ser mis comentarios.
La Confederación del Comercio Especializado de Madrid proclamó que la libertad “no es la opinión mayoritaria del comercio de Madrid”, y pidió un referéndum en el comercio con el fin de conocer la opinión de todos los “afectados”. Claves: empresarios contra la libertad; entre los afectados no incluirán a los consumidores.
El escritor y publicitario Joaquín Lorente aseguró: “Arreglar el mundo es facilísimo: hay que globalizar la alimentación, la sanidad, la enseñanza y la justicia. Y eso se puede hacer de manera sencilla”. Claves: falacia del Nirvana; todo se puede lograr interviniendo y haciendo en vez de dejar hacer.
Joan Puigcercós, portavoz de ERC, declaró: “El Ejecutivo catalán y el del Estado han vuelto a apostar por el industrialismo, porque este país no puede vivir sólo de las finanzas”. Claves: apostar con dinero y libertades ajenas; arrogancia de creer conocer la mejor combinación de sectores económicos.
Amparo Valcarce, secretaria de Estado de Servicios Sociales, Familias y Discapacidad, dijo que con el gasto público en la atención a las personas discapacitadas “se crearán al menos 300.000 nuevos puestos de trabajo” en los próximos ocho años. Claves: los puestos de trabajo no creados o destruidos por los mayores impuestos.
Jaime Curbet, editor de la revista Seguridad Sostenible afirmó: “el capitalismo ha supuesto prácticamente la desaparición del papel del Estado”. Claves: pensamiento único; espantajo del supuesto neoliberalismo estaticida.