Hoy los diarios de TV han aclarado dos cosas:
1. Hace años sucedió lo mismo en un hospital de Canarias.
2. Francia y Reino Unido tienen sondas diferentes que evitan este tipo de errores, porque en esos países se habían producico muertes de bebés por errores como este.
Por lo cual, todos aquellos ignaros que se apresuraron a colgar de un pino a la ATS (calificándola de no saber hacer su trabajo, no estar cualificada, pidiendo su cabeza, etc.) deberían disculparse. Ayer mismo leí un artículo de Fernando Ónega, en La Voz de Galicia, en que el pobre hombre largaba por esa boquita que Dios le ha dado toda clase de sandeces populistas. Tanto tópico irreflexivo es garantía de "éxito" , de buena acogida, del artículo de opinión del periodista gallego, el cual debería ir pensando en el jubileo. También fue de pena la intervención del director del Hospital Gregorio Marañón, echando, como si fuese mierda, toda responsabilidad sobre la enfermera. Y una cosa queda clara: como ya sucedió un caso en Canarias hace años (¡Ah, que no tuvo tanto eco en la prensa, claro!!) y como países europeos responsables, como los mencionados, ya habían tomado medidas, el director del hospital y el consejero de sanidad sin duda sí tienen una elevada responsabilidad en la desgracia ocurrida (mala gestión). Ate.