Mariano Rajoy sigue desgranando su programa de gobierno, en la segunda entrega de la entrevista del diario ABC. Y de partida advierte de que "la próxima legislatura no será fácil ni para el Gobierno ni para los españoles".
El líder de la oposición, que afirma que no está todavía en la confección de su Ejecutivo -a pesar de que, desde hace semanas, ya se escuchan varios nombres-, solemniza que su primera medida será "fijar un techo de gasto y endeudamiento de todas las administraciones".
En cuanto a las voces que llaman a revisar el sistema sanitario, recalca que "todos queremos un sistema universal, público y gratuito, pero a partir de ahora habrá que apretarse el cinturón".
Eso sí, en tónica con lo apuntado en su discurso habitual, habla de "las bases" para un "crecimiento económico sostenido" si el PP gana las elecciones, e insiste en que está convencido de que "no habrá un rescate en España".
Aunque la economía ocupa la mayor parte de la entrevista, Rajoy también habla de otros asuntos de actualidad, ninguno eso sí en clave interna. Sobre la educación, y a pesar de que reconoce que falla el modelo actual, destaca que no se planeta "recuperar la competencia de Educación para el Gobierno nacional" habida cuenta de que "referiría un referéndum".
También le preguntan por el conflicto lingüístico, si bien el presidente de los populares rehúsa fijar algún tipo de medida al hablar de que "en las calles de Cataluña no hay problema, cada uno habla el idioma que quiere". Y añade: "Esa debe ser la normalidad de las instituciones".
Para salir del final del túnel, apela a los consensos fundamentales: "También hablaría con los partidos, sobretodo con el PSOE, para ver si podemos, al menos en los grandes temas de Estado, llegar a un entendimiento en todas las instituciones. Creo en los consensos fundamentales, por eso soy un incondicional de lo que se hizo en la Transición".