El pasado 2 de agosto fallecía Edu, el hijo de el ex ministro y ex presidente de la Generalidad Eduardo Zaplana, lo que descubrió para muchos la historia de este niño y de la enfermedad que padecía desde su nacimiento.
Tras las numerosas muestras de cariño recibidas, Rosa Barceló, esposa de Zaplana, publica este domingo una carta "para agradecer a toda la gente que nos habéis apoyado en estos días tan difíciles para nosotros" en la que además cuentan la experiencia que ha supuesto la corta vida de Edu y los momentos, algunos duros y otros muy buenos, que alguien como ese niño representa para todos los que lo rodean.
Recuerda Rosa Barceló que su hijo "estuvo su primer mes y medio de vida dormido, sin despertar, sin succionar como lo hubiera hecho otro bebé". Después, "por fin llegó el diagnóstico: síndrome de Lowe" y la incertidumbre y el miedo que eso supuso.
Pero todo eso "pasa a un último plano. Era nuestro bebé y todos los que vivimos cerca de él le queríamos, cada uno a su manera". Así, Edu "mientras ha vivido ha sido feliz" y, en palabras de un propia madre "además de un bebé era un ángel", un sentimiento que los que han conocido niños como él pueden entender perfectamente.
Rosa Barceló también ha querido recordar en su carta a todos los que han colaborado y participado en el cuidado de su hijo durante su vida: los diferentes equipos médicos o colegios como el San Rafael o la Fundación Numen en Madrid: "No sé como agradeceros vuestra actitud", dice.
La carta termina en un tono muy personal y sentido: "Nos va a dejar un vacío enorme a todos los que le hemos conocido de cerca, pero sé que desde donde esté nos va a ayudar. ¡Adiós a mi bebé!".