Lo que tiene que hacer es dejarle al "niño" a los gilipollas que han hecho las leyes....para que ellos le eduquen
A quién habría que darle una bofetada y encerrarle por unos días no sería al padre. Quizás tampoco al Sr. Juez que es un funcionario que debe atenerse a la norma interpretarla en su verdadero sentido y dictar conforme a ella, sin prevaricar. A quién habría que darle la bofetada es al legislador que permite tales desatinos y/o deja la norma pendiente de tales resultados. No hace falta irse a Suecia para ver cosas semejantes. El sueño de la razón produce monstruos.
La educación de un hijo empieza 30 años antes de que nazca...
A la edad de 10, 11, 12 años, son malísimos... Y lo que más temen es un guantazo. Lo serio, es la INTENSIDAD DEL GUANTAZO... un guantazo, o cachete o sopapo, NO SON MALOS TRATOS; a los míos, yo, se los he dado y bien agusto, ¡a los míos!... (a los del vecino, hallá se jodan...) Les dás un sopapo y entienden a la primera... Luego, cuando vas a hablar con ellos; están en disposición de hablar... Y ahí, es donde entramos y nos batimos los sesos... ¡para no tener que llegar al guantazo!...
¡¡Que a mis hijos, no los quiere nadie, más, que yo eh!!...
Que por aquí en el foro anda alguno que se lía más que el tobillo de un romano...
Osea que hay que ir a cenar donde diga el niño ¡¡¡ y comprarle el móvil que le gusta... mas tarde el cohe que le guste... y al final es EL NIÑO el que apalea al padre por que no le dá suficiente para la droga.
nada nada... a seguir así ... no me extraña que luego los políticos se meen encima de sus votantes y les diga que es por su bién.
Es loq eu consiguen décadas de socialdemocracia con un marxismo cultural salvaje inculcado a las masas.
Suecia será historia, sus musulmanes s elos comeran, de hecho en ello estan.
Conde_lu, no recuerdo ahora otros comentarios tuyos pero me fijaré en el futuro, desde luego que si dices que eres conservador, no seré yo el que lo dude; simplemente me había sonado zapaterista ese comentario tuyo pero con tu explicación ya me ha quedado más claro lo que querías decir y ya no me suena tan progre :)
Saludos.
Psicopom, es mi opinión. no pretendo manipular. y Dios me libre de hacer proselitismo de la dichosa asignatura "iniciación en la masonería"
mi planteamiento no es si pegas a tu hijo también pegarás a tu mujer.
mi planteamiento es que se pueden esgrimir las mismas justificaciones para pegar a unos y a otros.
yo he recibido lo mío también, mi madre no, ni un pelo.
pero creo que el respeto o la obediencia no se gana con golpes. medidas disciplinarias y correctivas si, pero no con golpes.
mientras viva un hijo en casa del padre se hace lo que dice el padre.
insisto, disto muchísimo del pensamiento único. debería fijarse un poco más y/o mejor en mis comentarios pasados y/o futuros.
saludos.
Eso pasa por ir a donde no hay que ir.
Conde_lu, pues no pareces demasiado conservador, lo que dices es digno de un manual de educación para la ciudadanía.
Y eso que dices de que si le pegas a tu hijo igualmente pegarás a tu mujer es pura demagogia, mi padre (y era maestro nacional, ahora jubilado) me soltó unos cuantos tortazos cuando era pequeño (y que ahora veo que me dio con razón, aunque entonces me jodieron) y jamás ha tocado ni un pelo a mi madre. Y asociar ambas cosas es zafio y manipulador, al más puro estilo PetaZeta.
[conde_lu] Creo que hay una importante diferencia entre la torta al hijo rebelde y la paliza injustificada al cónyuge o a otro familiar ADULTO (¿qué pasa, que compartimos el falso dogma de que sólo hay hombres que pegan a mujeres?): los padres son tutores de sus hijos y, como tales, tienen la responsabilidad de educarlos, cosa que no sucede con el resto de relaciones familiares.
Así pues, no es aplicable lo que dice de que "se pueden esgrimir las mismas justificaciones para pegar a unos y a otros". Hay infinidad de situaciones en las que los padres tienen que obligar a los hijos a hacer cosas que éstos no quieren (a bañarse, a tomarse la verdura, a hacer los deberes...) para lo que deben usar una coacción cuyo uso sería injustificable con un adulto (sea cónyuge o no).
Recuerde que "Educar" proviene etimológicamente de "ducere", que significa "conducir", y eso no es sino forzar una voluntad ajena para hacerla ir por los caminos adecuados. Eso implica el uso de la autoridad y, si hace falta, de la fuerza (de modo excepcional, racional, comedido y justificado, pero siendo fuerza al fin y al cabo).
Desde luego, si se puede evitar el uso de esa fuerza, mejor (la mayoría de las veces hay caminos alternativos). Pero lo que no se puede es criminalizarla y prohibirla sean cuales sean las circunstancias. Al fin y al cabo, aun con su carácter excepcional, esa fuerza ES un recurso educativo legítimo. No podemos olvidar que el problema no es su uso sino su abuso.
Un saludo.