Las feministas francesas creen que distinguir entre "señora y "señorita" es un signo de machismo que persiste en esta sociedad. Por ello, numerosas asociaciones han lanzado una campaña para eliminar esa opción de los formularios y de la correspondencia.
Las entidades Osez le féminisme y Chiennes de garde consideran que incluir "mademoiselle" –señorita- supone que la mujer debe exponer su situación personal y familiar, algo que no ocurre con los hombres, que siempre son "señores".
En la web de la campaña, las asociaciones detallan que "señorita tiene un carácter indiscreto, que señor y señora, más neutros, no tienen", y remarcan que "el lenguaje es un indicador de desigualdad".
Según cuenta La Información, las organizaciones creen que el término "señorita" es sexista y discriminatorio, y añaden que supone que el matrimonio otorga algún "valor adicional" a la mujer que, en el caso de los hombres, es irrelevante.
Las feministas francesas también demandan que no se distinga en los trámites con la administración pública entre "nombre de casada" y "nombre de soltera", sino que en los casos en que corresponda -porque la mujer haya decidido utilizar el apellido de su marido- se use la opción "nombre de nacimiento".