Menú

Jubilados al volante de 'taxis de la droga' para ganarse un sobresueldo

Cobran tres euros a cada pasajero y ocho "cuando hay mucho mono y es urgente". Se enfrentan a penas de entre tres y seis años de cárcel.

El Grupo Municipal de IU en Madrid ha asegurado este martes que jubilados y taxistas ganan un sobresueldo conduciendo ‘cundas’ hasta zonas de venta de drogas como la Cañada Real Galiana, un hecho que el coordinador general de Seguridad y Emergencias, Javier Conde, ha reconocido y ante el que ha asegurado que la Policía Municipal está actuando.

Durante la comisión ordinaria de Seguridad del Ayuntamiento de la capital, la edil de IU María del Prado de la Mata ha recordado que, junto a las ‘cundas’ históricas de Simancas, Embajadores y Sierra de Guadalupe ahora "ha cambiado el modus operandi" y ha surgido "un nuevo yacimiento de empleo".

"Ya no son sólo los yonkis que quieren ir a la Cañada y prestan su coche, sino que, por tres euros cada pasajero u ocho euros cuando hay mucho mono y es urgente, señores jubilados, taxistas... hacen sus viajes a la Cañada. Eso se llama delito", ha señalado la concejala según recoge Europa Press.

Se trata, por tanto, de ciudadanos que "tienen en regla sus coches, sus papeles, que van bien vestidos, que no tienen síntomas -de drogadicción-, que lavan sus coches... Nos consta que hay operativos judiciales, policía y controles, pero la realidad es que las ‘cundas’ siguen, y eso sí que está penado en el artículo 368 del Código Penal", que prevé entre tres y seis años de prisión para quien "favorezca o facilite el consumo ilegal de drogas".

Ante estas informaciones, Conde ha reconocido la existencia de estas ‘cundas’ y ha recordado que tanto la Policía Municipal como el Cuerpo Nacional han establecido "operativos de seguridad in situ para controlar esta actividad" mediante la identificación tanto de personas, para "comprobar que no tengan reclamaciones judiciales", como de vehículos, para "constatar que la documentación del vehículo y de los conductores se encuentra en regla".

"La forma de operar se ha ido modificando. Ya no nos encontramos ante vehículos que se puedan retirar por estar en mal estado ni ante personas que tiene cuentas pendientes con la justicia", ha admitido el responsable municipal.

Herramientas para luchar

Así, ha indicado que para luchar contra este nuevo fenómeno se cuenta con "dos herramientas legales que, seguramente, no son suficientes": la inspección de vehículos tanto en el origen como en el destino de la cunda, y el seguimiento al vehículo para "comprobar que ha hecho un desplazamiento para adquirir sustancias estupefacientes".

De esta manera se puede aplicar el artículo 368 del Código Penal, si bien este tipo de acciones requieren "un operativo muy grande", que emplea casi 2.400 jornadas de policía al año. "Esto ha permitido conseguir seis detenciones y acabar con seis de esos taxis ilegales", ha apuntado Conde.

Junto a esto, la Policía Municipal también impone denuncias administrativas porque las ‘cundas’ "realizan un ejercicio de instrusismo en el sector del taxi", al "transportar viajeros sin autorización y sin seguro de responsabilidad civil", lo que deriva en la retirada del vehículo por la grúa municipal.

Este tipo de procedimientos provocó seis detenciones, 137 denuncias por tráfico, 22 vehículos retirados, 2.293 personas filiadas y 893 controles de la documentación de vehículos, según ha detallado el coordinador general de Seguridad y Emergencias.

"El esfuerzo es grande. Hay resultados pero no son los que nos gustarían y no conseguimos con las herramientas que tenemos actualmente erradicar esta practica que crea inseguridad a los vecinos", ha lamentado finalmente.

Temas

En Sociedad

    0
    comentarios
    Acceda a los 3 comentarios guardados