La ciclogénesis explosiva mantiene desde la madrugada en alerta a veintisiete provincias por fuertes lluvias y rachas de viento de hasta 100 kilómetros por hora, informa la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en su página web.
Cantabria, Navarra, Asturias y las provincias de Burgos, León, y Palencia (Castilla y León) y La Coruña, Lugo, Pontevedra (Galicia) están en alerta naranja (riesgo importante) por rachas de viento que alcanzarán los 100 kilómetros por hora en puntos de la Cordillera Cantábrica, el Pirineo navarro, la costa de Galicia y los Picos de Europa.
En las provincias de La Coruña y Pontevedra (Galicia) habrá mar de fondo del noroeste con olas de 4 a 5 metros y mar muy gruesa
Las comunidades de Aragón, Castilla y León, Madrid, La Rioja y el País Vasco están en alerta amarilla (riesgo) por vientos y las provincias de Guadalajara (Castilla la Mancha), Girona (Cataluña) y Cáceres (Extremadura) también en alerta amarilla por vientos.
Las provincias de Ávila y Salamanca (Castilla y León), Cáceres (Extremadura) y Galicia mantienen la alerta amarilla por lluvias con una precipitación acumulada de 40 litros por metro cuadrado en 12 horas.
La Aemet avisa de que con la alerta naranja existe un riesgo meteorológico importante, fenómenos meteorológicos no habituales y con cierto grado de peligro para las actividades usuales, y con la amarilla no existe riesgo meteorológico.
La situación en Galicia
El fuerte viento y la lluvia registrada esta madrugada en Galicia ha dejado árboles caídos y contenedores de basura tirados en diversos puntos, principalmente de zonas costeras, sin que se hayan producido daños personales, informaron a EFE fuentes del servicio de Emergencias.
La borrasca Petra, que dejó amplias precipitaciones y fuertes rachas de viento a su paso durante la noche, aunque ya no al amanecer, ha afectado a diversos puntos de Galicia, pero su intensidad ha sido más notoria en zonas costeras y en puntos altos de la geografía.
Según el servicio de Emergencias, se han registrado un total de 23 incidencias en la provincia de La Coruña, 18 en la de Pontevedra, 13 en la de Lugo y solo una en la de Orense.
Toda la flota lucense permanece amarrada a puerto, según informaron hoy a EFE las cofradías de pescadores de Burela y Celeiro debido al temporal.
Según las mismas fuentes, ni siquiera los arrastreros se hicieron a la mar, a la espera de que pase el temporal, que alcanzó fuerte intensidad durante la noche.
Los cinco parques de bomberos del Consorcio provincial, integrado por la Xunta de Galicia y la Diputación de Lugo, se encuentran en situación de alerta por la previsión de fuertes vientos y lluvias extremadamente copiosas, pero ninguno de ellos registró avisos por incidencias graves en las últimas horas en las zonas de Vilalba, Barreiros, Viveiro, Chantada o Sarria.
Por su parte, la Guardia Civil ha informado de que las vías principales están expeditas, aunque recomienda precaución para circular por la red secundaria, dado que los conductores se pueden encontrar con árboles o ramas caídas, como consecuencia de las fuertes rachas de viento e incluso inundaciones en el firme.