Cuenta El Mundo que "navegaron por el río Chicago en un barco llamado First Lady alquilado por los alemanes". Eso, que paguen ellos que son los que tienen pasta. Pero a Pedro J. este paseo se la refanfinfla y pide que Merkel nos respalde "con más decisiones" porque, que vaya enterándose, Rajoy es el único amigo que le queda, "casi el único valedor de la política de rigor fiscal propugnada por la canciller alemana", así que podía tirarse el rollo y "recompensarle con un apoyo más firme".
Federico Jiménez Losantos habla de lo injusta que es la vida. "No es justo que el PP esté contra la pared y el PSOE sueñe con llevarlo al paredón". Pues no, no es para nada justo. "Rajoy ha remoloneado seis meses y ha retrasado esas reformas para las que el electorado le dio mayoría absoluta (...) Pero no hay alternativa a las reformas, excepto hacerlas todas" y "hacerlo ya".
ABC está inspirado. Merkel y Rajoy pasearon "tranquilos por los canales de Chicago" en un "día soleado, camisa blanca él; rebeca rosa ella". Le recuerda a la alemana que Rajoy y ella son "de la misma familia política" y a la familia no se la deja tirada, córcholis. Merkel "debería contribuir a calmar a los especuladores malintencionados" y podría "ir algo más lejos que una declaración de apoyo a España". Qué tía más siesa, oye.
El País es mucho menos poético y se limita a un rácano y escueto "a bordo de un barco, entre los rascacielos de Chicago". Cuenta el periódico de Prisa que a Rubalcaba le ha dado otra vez por ofrecer "un pacto". Es más, hoy mismito va a "llamar a Rajoy para pactar una posición común". Para demostrar su buena voluntad, en el editorial anima a la "España movilizada" contra los "recortes" en educación. "Padres y docentes están preocupados y no les faltan razones" porque hay que ver de que "forma indiscriminada se aplican los recortes". Es más, "se observa una aplicación desesperada y lineal de la tijera allí donde resulta más fácil cortar".
La Razón ruega a Alemania que "relaje su frontal oposición" y que el BCE ayude un poco, caramba, que Rajoy tiene "los deberes hechos" y quien "ha dado muestras contundentes de compromiso y de responsabilidad" se merece un premio. Alfonso Merlos atiza a Hollande por pedir el rescate de los bancos españoles. "La metedura de pata en su diagnóstico solo se entiende desde su adanismo, su infantilismo y su inexperiencia". Un "neo-Zapatero (...) Lo que nos faltaba". Hace muy requetebien Rajoy en no liarse a puñetazos con él y "seguir a lo suyo" porque "sabe que no hay otra forma de sanar la aguda resaca de nuestros locos años de borrachera".
Tampoco a La Gaceta le cae en gracia Hollande, "el aguafiestas". Lo que tiene que hacer Rajoy es "con Merkel, sí, con Hollande, nada", dice Carlos Dávila, que contar con este "austero de inteligencia" es "como encomendarse al Papa Borgia".