El Mundo cuenta que el BCE se hace el sordo. "La UE insta a España a pedir que el fondo de rescate compre deuda". ¿Y cuál es la diferencia?, se preguntarán. Pues El Mundo es claro como el agua. "Alemania presiona a Rajoy para que se olvide del BCE y recurra a este instrumento que implicaría un endurecimiento de las medidas de ajuste". Ay madre, que me sé yo a por quién irían nuevos ajustes. Dice Pedro J. que "ayer saltaron todas las alarmas", vamos, como todos los días. Intenta hacer entrar en razón a los mercados porque es "irracional que hagan caso omiso a las reformas". Le echa un capote a Rajoy contando las cosas buenas que ha hecho, cómo serán de buenas que "el 73% de los ciudadanos las rechaza", viene a decir. "Es imprescindible que Merkel dé permiso a Dragui para que actúe en los mercados".
El Mundo lleva en su portada la muerte de Oswaldo Payá y apunta a que fue un accidente. "Detenido el español que conducía el vehículo en el que murió Payá. Ángel Carromero admite a la policía cubana que no vio la señal y cayó por un terraplén".
La Gaceta nos da una idea de por qué el BCE nos trata tan mal. "Si el BCE facilita un mayor endeudamiento para las administraciones públicas españolas, bien podría suceder que éstas se relajaran" y ¡hala!, a pedir, y pedir, y gastar y gastar como locos, que ya nos conocemos. A La Gaceta no le parece del todo mal que nos rescaten, pero al Ejecutivo "no le entusiasma la idea no solo porque lo desgastaría enormemente, sino que le obligaría a recortar partes del sector público" y eso jamás de los jamases.
También lleva en su portada la muerte de Payá, con un testimonio que pone los pelos de punta del hijo del disidente cubano. "Fue un atentado. Los embistieron con un camión".
En El País, otro ingenuo, Jordi Canals tampoco entiende que "en estos momentos de urgencia no se eliminen organismos públicos o asesores de altos cargos que generan gasto real (...) Es necesario reaccionar, plantear un marco creíble de reducción del gasto, y que permita sostener el gasto de protección social de quienes realmente lo necesitan". En el editorial, el periódico de Prisa abronca como solo él sabe hacerlo al BCE. "La inhibición del BCE carece de razones sólidas y sólo se explica como una estrategia de castigo". Si el BCE solo sirve para controlar la inflación "no serían de recibo sus sermones sobre la austeridad de los demás". Muy bien, dale duro. Miguel Ángel Aguilar ve el cielo abierto para cargarse a Rajoy. "A un político que haya perdido la cara solo le queda marcharse". Y recuerda con nostalgia el 11-M, cuando "pudo observarse que la desgracia en vez de dispersar puede unir, sacar lo mejor de cada uno" y que sirvió para "escarmentar a los mentirosos". Según él, "lo que nos corresponde es reclamar que vengan con premura los hombres de negro". Cualquier cosa menos el PP.
La Razón habla de una "acertada ofensiva diplomática de Rajoy con Merkel y Obama". La cosa debe estar peor de lo que pensamos porque hasta le hace carantoñas a Rubalcaba, que ayer "reconocía acertadamente" que el "vapuleo" que estamos sufriendo "no se corresponde con la verdadera realidad de nuestra economía". Además, La Razón le ha hecho una encuesta a Rajoy para consolarle. La mayoría de los ciudadanos cree que "España ha hecho sus deberes" y "que la UE debe ayudar". Como si la encuesta la hubiera hecho el mismísimo Rajoy.
ABC lanza un largo quejío. "España, rompeolas de los ataques al euro". Jo. Y se le llena la boca con exigencias a Alemania. "Es el momento de que Berlín demuestre que sus palabras de confianza hacia España no son mera retórica. Las declaraciones germanas deben traducirse ya en acciones concretas". A Edurne Uriarte quien le pone enferma es el listo de Felipe González. "Ofrece una serie de recetas para superar la crisis de deuda de España sin incluir recorte alguno (...) Dan ganas de volver a poner a Felipe González al frente de España para que nos arregle la crisis si un solo recorte", a ver cómo se las apaña, el espabilado.