(Libertad Digital) Los hermanos Gabilondo comenzaron decidiendo si se hablaban de tú o de usted.
"Hola, hola qué hay. Vamos a ver. Yo he hecho muchas entrevistas a ministros y siempre les hablo de usted. ¿Qué va a ser más delito, que le hable de tú a un ministro o que le hable de usted a un hermano?", comenzó Iñaki.
"Yo creo que hay que hablar de tú a tú. El hablar de tú a tú a mí es una expresión que me gusta muchísimo. Es hablar poniéndose en el lugar del otro. Porque lo lógico sería hablar de mí a ti o de yo a tú, pero de tú a tú… entonces a mí me gusta hablar con Iñaki Gabilondo de tú a tú", dijo el hermano.
"Bueno, por otra parte, a mí no me saldría hablar con Ángel Gabilondo de usted, aunque, al ministro Gabilondo, en fin", zanjó el hermano periodista.
"Oye, una cosa ¿cómo se te ha ocurrido esto?", continuó inquiriendo Gabilondo en el ambiente relajado de una sala de La Moncloa. "Se les ha ocurrido a otros", contestó Ángel Gabilondo. "Son otros los que piensan que puedas corresponder a una llamada. Me llamaron, me dijeron que pensaban que yo podía hacer esto. Respondí por responsabilidad. Es una situación complicada y yo he dicho que sí".
El periodista le recordó a su hermano lo "efímero" del cargo que ahora ostenta, pero al flamante ministro no pareció importarle. "Me gusta mucho esa palabra, en cada sitio hay que saber que se está un poco de paso. Cuando llegas al Ministerio, ves que está lleno de cuadros de los anteriores ministros, hay que saber que uno acaba hecho un cuadro pase lo que pase".
En plan protector, Iñaki Gabilondo preguntó a su hermano si está preparado para oír las "cosas fuertes" que se escuchan en el Parlamento, aguantar a la prensa "zumbando", afrontar la "guerra encarnizada" de la política. No se amilanó Ángel Gabilondo ante el reto. "También se compensa con otras cosas. Hay mucha gente muy valiosa con muchas convicciones". "Esto es un oficio y tendré que aprender ese oficio. La guerra política está siempre de una o de otra manera".
Pese el conocido curriculum de Ángel Gabilondo, promotor de la Plataforma de Apoyo a Zapatero, mentor de Carrillo, su inefable hermano le quiso revestir de un halo de independencia. "Ángel, tú no eres del SOE, en el momento actual el Gobierno ha hecho una especie de piña especial en torno al núcleo duro del SOE ¿no temes ser un ministro extramuros?".
El Gabilondo ministro dijo que "tampoco es lo peor del mundo" porque comparte "proyecto y convicciones" con Zapatero "aunque no sea un militante con carné". "Hay muchas veces que uno no sabe qué es pero sabe perfectamente de qué no es".
Ya en materia de Educación específicamente, Iñaki le preguntó por Bolonia, y Ángel respondió que iba a "escuchar" a los estudiantes, a quienes dio la razón en la reivindicación de más becas. "En España sólo hay el 20 por ciento de estudiantes con beca, mientras en los países de nuestro entorno está en el 40 por ciento". En cuanto a la vuelta de Universidades al Ministerio de Educación, tras su efímero paso por Ciencia y Tecnología, Gabilondo, el ministro, dijo que la distribución de competencias le corresponde al presidente del Gobierno, y que "la universidad es, además de docencia, investigación y transferencia a la sociedad", por lo que "esté donde esté, la universidad es ciencia e investigación".
Ángel Gabilondo dijo que existe un "consenso" en que los principales "desafíos" de la Educación en España son "el abandono escolar, la cohesión territorial y la formación profesional". El nuevo ministro hizo especial hincapié en la Formación Profesional, ya que considera que "200.000 estudiantes más debían ir a la formación profesional" y explicó que esto "no se puede hacer esto sin las comunidades autónomas y sin el Ministerio de Trabajo".
El Gabilondo periodista no pudo evitar evocar las conversaciones familiares. "Sabes una cosa, hemos hablado ya tantas veces de que en el proceso democrático tras la muerte de Franco, algunas cosas no nos han salido. Tú ahora eres el ministro de una de esas cosas de las que no han terminado de salir, la Educación".
"Se han dado muchos pasos", dijo el ministro, que aseguró que la Educación es el gran desafío de la democracia porque la única manera de transformar la sociedad es a través de la cultura y la educación. "Tengo pasión y convicción".
"¿No te abruma, Ángel, no te da miedo?" Pero a Gabilondo ministro no se le veía asustado. En respuesta a su hermano, dijo que no estaba "abrumado" por el nombramiento pero que "si estuviese abrumado, lo afrontaría abrumado" porque considera que "el gran desafío de la democracia es la educación, la democracia esencialmente es la educación, en esto tengo pasión y convicción".
"Bueno, Ángel, pues que tengas muchas suerte. A lo mejor algún día tendré que criticarte severamente y sabes que lo haré", advirtió Iñaki. "Estoy tan seguro, estoy tan preparado". No esperaba menos", contestó el hermano y afirmó que "las críticas son indispensables", pero que "espera encontrar en el corazón de esas críticas razones y argumentos", y está seguro de que será así en el caso de su hermano Iñaki.