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El Gobierno admite que abrió los osarios del Valle de los Caídos

Según publica la revista Interviú, el Gobierno procedió a abrir los osarios de Valle de los Caídos sin orden judicial, en secreto y sin avisar a los monjes benedictinos el pasado mes de septiembre. Desde Vicepresidencia admiten la apertura pero afirman que se hizo "desde la legalidad".

La polémica saltó este lunes con la publicación de un reportaje de Interviú sobre la apertura de las fosas del Valle de los Caídos: según la revista, un equipo de forenses entró el pasado 6 de septiembre a las tumbas en secreto y sin orden judicial. Los trabajos, explica la publicación, se habrían iniciado ese día y acabaron el 9 del mismo mes.

La revista contaba que nueve familias habían reclamado los cuerpos de sus seres queridos, nueve republicanos ajusticiados durante la Guerra Civil y trasladados al mausoleo sin su conocimiento.

Una vez que la vía judicial se estancó, estas familias acudieron al Ministerio de la Presidencia, donde presentaron un proyecto para recuperar los cuerpos. Pero su petición fue denegada y el Gobierno comunicó públicamente el 16 de septiembre que no se procedería a la exhumación de restos del Valle de los Caídos.

Interviú cuenta que los expertos accedieron a los seis osarios de las capillas laterales del templo y a los dos más grandes de tres plantas cada uno y perpendiculares al altar central. Los cuerpos se encontraban apilados en cajas de madera con un número de registro; miles de ellos están en cajas comunes con restos de seis o siete personas identificados por su lugar de procedencia.

Los forenses comprobaron que los cofres se han podrido por la humedad y que es prácticamente imposible retirar un cuerpo determinado, o una caja independiente de otra. Los restos están mezclados y no es posible distinguir unos de otros.

La versión del semanario contrasta con la de Vicepresidencia. Fuentes próximas al departamento, del que depende Patrimonio, han confirmado a elmundo.es la apertura de los osarios. Afirman que trabajan en ello "desde hace meses" y que han tomado muy en serio las peticiones de los familiares. Matizan, no obstante, que lo están haciendo "de acuerdo a la legalidad" y que "no hay nada en secreto", como afirma Interviú.

El Ejecutivo dice, además, que su actuación responde a unos criterios de prudencia, rigor y respeto a los familiares. Afirma, además, que los monjes y la autoridad judicial tienen toda la información sobre los trabajos.

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