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El Papa hace un llamamiento a los conductores para evitar accidentes en las vacaciones

Benedicto XVI expresó este domingo su preocupación por los numerosos accidentes de circulación, sobre todo en vacaciones, que se cobran tantas vidas e hizo un llamamiento a los conductores para que sean prudentes, "ya que la vida es única". Varios miles de personas asistieron en la plaza de San Pedro del Vaticano al rezo del Ángelus.

Benedicto XVI expresó este domingo su preocupación por los numerosos accidentes de circulación, sobre todo en vacaciones, que se cobran tantas vidas e hizo un llamamiento a los conductores para que sean prudentes, "ya que la vida es única". Varios miles de personas asistieron en la plaza de San Pedro del Vaticano al rezo del Ángelus.
L D (EFE) El Papa manifestó que en estos días en que comienzan en el hemisferio norte el verano y las vacaciones, es necesario el compromiso de todos para evitar tantos accidentes de tráfico, en los que "la mitad de las víctimas son jóvenes". "En estas fechas muchas personas comienzan sus vacaciones. Quiero hacer un llamamiento a la prudencia a todos los que marchan hacia sus lugares de vacaciones. Cada día, por desgracia, y especialmente el fin de semana, se registran en las carreteras accidentes que se cobran trágicamente muchas vidas humanas y más de la mitad son jóvenes", resaltó el Obispo de Roma.

Joseph Ratzinger agregó que, aunque en los últimos años se han tomados muchas medidas para prevenir accidentes, "se puede y se debe hacer más, con la contribución y el compromiso de todos". El Pontífice añadió que es necesario combatir "la distracción y la superficialidad" de los conductores, "que en un momento pueden arruinar el futuro de ellos y de los otros". "La vida es valiosa y única, y hay que respetarla y protegerla siempre, también con un correcto y prudente comportamiento en las calles", subrayó el Papa.

Benedicto XVI recordó que el próximo día 29 la Iglesia celebrará la festividad de San Pedro y San Pedro y que él presidirá en la basílica de San Pedro una solemne misa en la que participará, como es tradición, una delegación del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla. Ese día impondrá a los nuevos arzobispos nombrados este año el tradicional "Palio", símbolo de comunión con la sede de Pedro. El palio es una estola, signo litúrgico de honor y jurisdicción que impone el Papa a los arzobispos, que pueden usarlo en sus respectivas iglesias y provincias eclesiásticas.

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