Los nacionalistas del PNV no han acogido de buen grado el nombramiento de Mario Iceta como obispo de Bilbao puesto que no cumple el perfil que esperaban. Es vasco, euskaldún pero no es nacionalista. De hecho, ya como auxiliar, denunció la hipocresía del PNV ante su actitud ante la ley del aborto, algo que no gustó nada a la formación vasca y por el que el prelado fue duramente criticado.
De este modo, ante este nombramiento el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha afirmado que espera que el nuevo obispo de Bilbao, Mario Iceta, "sepa acoger la diversidad y la riqueza" de la sociedad de Vizcaya y, además, acepte "la iglesia vizcaína que recibe". En este sentido, le ha recomendado seguir "el ejemplo" del anterior obispo de San Sebastián, Juan María Uriarte.
En una entrevista a Radio Euskadi recogida por Europa Press, ha afirmado que su partido acoge el nombramiento de Mario Iceta "con absoluto respeto" y ha destacado que "vamos a tener un obispo vizcaíno", lo que "es bueno".
Asimismo, ha indicado que, desde el punto de vista político, espera "apertura" y "amplitud de miras" para "comprender la sociedad vasca en toda su dimensión, no sólo la religiosa", porque la Iglesia en Vizcaya "es una institución importante". "Espero que, durante su mandato, sepa acoger esa diversidad y esa riqueza de la sociedad vizcaína tal como es", ha agregado.
Ortuzar ha deseado, por otra parte, al nuevo obispo de Bilbao "humildad pastoral para aceptar la iglesia vizcaína que recibe", que es "muy fuerte y comprometida", ha tenido tradicionalmente "una línea muy importante de actuación social" y mantiene "una determinada forma de ver la religión y la acción pastoral".
El dirigente nacionalista ha explicado que, "si pudiera, le recomendaría que siguiera el ejemplo de otro vizcaíno, Juan María Uriarte", que demostró "una buena sensibilidad hacia la sociedad vasca sin matices religiosos" y supo "estar al frente de una Diócesis, pero apoyándose en ella".
Finalmente, ha precisado que "cada uno tiene que estar en su lugar", de manera que los partidos políticos no deben "inmiscuirse" en el ámbito religioso y "desde las instituciones religiosas deben ser respetuosos y saber respetar el ámbito de partidos de decisión de nuestras políticas, no sólo para los cristianos y los católicos, sino para toda la sociedad".