(Libertad Digital) Felipe González y Carmen Romero se casaron en 1969 en Sevilla. Y tienen tres hijos: Pablo, David y María. Ahora, tras casi cuarenta años como marido y mujer han decidido poner punto y final a su matrimonio. Así se lo han confirmado a elmundo.es fuentes del Partido Socialista, que han especificado que la ruptura no se debe a terceras personas sino a las continuas ausencias del ex presidente del Gobierno por motivos laborales y a la gran actividad profesional de Carmen Romero.
Romero conoció a Felipe González en Sevilla, por medio de unos amigos, ya que el ex presidente tenía entonces una novia que era compañera de curso de Carmen Romero y actriz universitaria. Tras un noviazgo de dos años se casaron por poderes y civilmente, en una ceremonia en la que el ex alcalde socialista de Sevilla, Luis Uruñuela, representó al novio porque éste se encontraba en Burdeos, en una reunión del PSOE en el exilio.
Al día siguiente, 18 de julio, Felipe González llegó a Sevilla y se celebró la ceremonia religiosa en un ambiente íntimo, a la que sólo asistieron los padres y unos cuantos amigos, y de la que no se realizó ninguna fotografía. Cuando los novios llegaron al monasterio de Loreto –Felipe González lo hizo en el Renault 8 de Alfonso Guerra– no hubo marcha nupcial que anunciase la ceremonia.
El matrimonio fue a Francia de viaje de novios, en donde Felipe acudió a visitar a Llopis, un histórico del PSOE. Fue en ese viaje cuando Carmen puso a su marido el sobrenombre de "Isidoro". A su regreso se instalan en Sevilla, en donde ella comienza a ejercer como profesora. El 28 de abril de 1972 nace su primer hijo, Pablo, y justo un año después, el segundo, David.
Tres años después, en 1975, se instalan en Madrid. "El proceso de adaptación fue duro", según Carmen Romero. En octubre del 78 nace su hija María. En 1979 y en 1982 acompañó a su marido en las campañas electorales del PSOE, y el 28 de octubre de ese año cambian su residencia del piso del barrio de la Estrella al Palacio de la Moncloa.