Según informa el diario El Mundo, el Ayuntamiento de Madrid quiso poner un nuevo radar en la M-30 con fondos del Fondo Estatal de empleo y Sostenibilidad Local, es decir, el Plan de estímulo económico conocido como Plan E que aprobó el año pasado el Gobierno Zapatero.
La propuesta de Gallardón para 2010 consistía en dos radares. En uno de ellos se trataba de una simple adaptación de uno ya existente por un monto de 5.000 euros. El otro era de nueva creación, "la instalación de un radar completo en pórtico existente de Movilidad en la zona este de la M-30. Cámara, antena, CPU, cabina, fuente de alimentación, dispositivo para conexión a red, 73.000 euros. Tendido de fibra hasta armario en base del pórtico, 27.000".
Es decir, 100.000 euros en algo que el ayuntamiento considera algo prioritario, requisito indispensable para que sean concedidos los fondos del Plan E. Al final, los dos radares se han retirado del proyecto porque la oposición socialista se negó a avalarlo. Pero el ayuntamiento no se echa para atrás. Sigue considerando que ese radar es necesario y se pagará con fondos del propio ayuntamiento, cuyo gasto el año próximo está disparado.