L D (EFE) García Montes, en una comparecencia ante los periodistas junto a Francisco Párraga para anunciar la presentación de este recurso y su disconformidad con el desarrollo de las diligencias, aseguró que existen varios sospechosos del entorno familiar y social del pequeño que, según dijo, aparecen en el propio sumario y que deberían haber prestado declaración en su día.
Dónovan Párraga desapareció de su domicilio el 27 de febrero de 2002, cuando tenía 12 años, y sus restos fueron encontrados once meses después en una fosa séptica, a escasos metros del domicilio donde vivía con su madre en Trijueque (Guadalajara). Según García Montes, en este caso "matan a un niño aprovechando la noche" para "hacerle daño a él y a la familia", y "voy a ir a por todas, porque quiero que el padre se quede tranquilo".
"Este es el sumario más virgen que he conocido", dijo García Montes, para quien se debe reabrir el caso y seguir investigando, y espera que en el plazo máximo de quince días se pueda conocer el pronunciamiento. Para el letrado, el Caso Dónovan "empezó siendo una mala instrucción policial, una pésima investigación judicial" y "la guinda" ha sido el segundo auto de sobreseimiento notificado el pasado día 31 por entender que no hubo intervención de terceras personas en la muerte del pequeño, por lo que entiende que "había una voluntad deliberada de cerrar el sumario".
Afirmó que el caso se volvió a reabrir tal vez porque "nosotros hicimos mucho ruido". Calificó de negligencia el que la fosa donde fue encontrado Dónovan no se investigara hasta un año después de su desaparición, así como que no se procediera al vaciado del contenido realizando un filtrado de manera que se hubiesen podido encontrar restos óseos y orgánicos claves que desvelaran nuevos datos. Una de las pruebas aludidas por Montes para hablar de homicidio es la aparición de sangre humana en la ropa del menor, lo que evidencia que pudo ser golpeado, y descartó que se cayera a la fosa, porque se hubieran encontrado restos suyos al tratar de sujetarse a alguna pared para subir.
El mismo día en que se les notificó el sobreseimiento del caso, García Montes pidió ante este juzgado y por escrito que declare la policía judicial, así como una copia de la ratificación de la declaración de los forenses sobre los informes de las autopsias realizadas a Dónovan, con el fin de que pueda ser valorada y estudiada por los médicos José Antonio García Andrade y José Manuel Reverte.
Dónovan Párraga desapareció de su domicilio el 27 de febrero de 2002, cuando tenía 12 años, y sus restos fueron encontrados once meses después en una fosa séptica, a escasos metros del domicilio donde vivía con su madre en Trijueque (Guadalajara). Según García Montes, en este caso "matan a un niño aprovechando la noche" para "hacerle daño a él y a la familia", y "voy a ir a por todas, porque quiero que el padre se quede tranquilo".
"Este es el sumario más virgen que he conocido", dijo García Montes, para quien se debe reabrir el caso y seguir investigando, y espera que en el plazo máximo de quince días se pueda conocer el pronunciamiento. Para el letrado, el Caso Dónovan "empezó siendo una mala instrucción policial, una pésima investigación judicial" y "la guinda" ha sido el segundo auto de sobreseimiento notificado el pasado día 31 por entender que no hubo intervención de terceras personas en la muerte del pequeño, por lo que entiende que "había una voluntad deliberada de cerrar el sumario".
Afirmó que el caso se volvió a reabrir tal vez porque "nosotros hicimos mucho ruido". Calificó de negligencia el que la fosa donde fue encontrado Dónovan no se investigara hasta un año después de su desaparición, así como que no se procediera al vaciado del contenido realizando un filtrado de manera que se hubiesen podido encontrar restos óseos y orgánicos claves que desvelaran nuevos datos. Una de las pruebas aludidas por Montes para hablar de homicidio es la aparición de sangre humana en la ropa del menor, lo que evidencia que pudo ser golpeado, y descartó que se cayera a la fosa, porque se hubieran encontrado restos suyos al tratar de sujetarse a alguna pared para subir.
El mismo día en que se les notificó el sobreseimiento del caso, García Montes pidió ante este juzgado y por escrito que declare la policía judicial, así como una copia de la ratificación de la declaración de los forenses sobre los informes de las autopsias realizadas a Dónovan, con el fin de que pueda ser valorada y estudiada por los médicos José Antonio García Andrade y José Manuel Reverte.