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La prensa de un vistazo

Insultos a Jiménez Losantos en Público y el "doberman enloquecido" de Edurne Uriarte

Madre, la que ha armado el Gobierno por unos grititos a Zapatero. Fuera de sí, desempolvaron el estribillo y ¡hala!, todos a una: ultraderecha, derecha extrema, reventadores, fascistas... Está reproducido en todos los periódicos. Y mucho minero.

Zapatero ha montado un Cristo con los abucheos, el Gobierno se ha vuelto más papista que el Papa con la bandera, la Fiesta Nacional y los desfiles militares y va a prohibir los abucheos. Al menos, los que le hacen a Zapatero.

Público rompe su silencio sobre la Fiesta Nacional y, muy animado, saca artillería pesada. Pim, pam, pum, ra-ta-ta-ta-ta. "Rajoy no se desmarca de los abucheos de la ultraderecha". Manuel Rico: "Sobre gamberros, abucheados y mudos". "Que esos incultos sean en su mayoría miembros de la ultraderecha es, lógicamente, una mera redundancia". No entiendo lo de "incultos". ¿Es por faltar el respeto a los caídos por la patria? ¿En Público? Me aclaren, por favor. Y compara la actitud de la buena gente como Zapatero, que "tuercen el gesto, tragan saliva y aguantan los insultos" –sí, ya lo vemos- con mala gente como Aznar, que "responden con gestos obscenos" y se ponen "a la altura de los cafres". Y Rajoy, "además de amparar a presuntos corruptos, tampoco le molesta la trompería de la extrema derecha". Manuel Saco, como siempre, da una lección de educación y moderación frente a la "troupe fascista". Tras pedir "respeto" al "carnero de la Legión", arremete contra Jiménez Losantos y Pío Moa. "Si de un Jiménez Losantos o Pío Moa, que en su juventud militaron en la izquierda radical, se puede llegar a ser en la escala evolutiva un abanderado de la extrema derecha de tomo y lomo, ¿a dónde llegarán estos cachorros nuestros (por las Nuevas Generaciones del PP) que ya son educados para fachas desde su más tierna infancia?". Pues aplicando esta lógica podrían acabar en Público.

El País no opina nada, como siempre que hay una polémica de actualidad, y se limita a reproducir todas y cada una de las declaraciones de los socialistas en las que aparece las expresiones "fanáticos intolerantes", "fascistas", "ultraderecha, "derecha extrema". Por lo demás, se concentra en los mineros chilenos y dedica un sesudo editorial a Ahmadineyad, que ocupa la atención de todo el mundo, como es sabido.

El Mundo ve así el manoseo que hace el gobierno de las pitaditas. "Chacón pretende sacar rédito de los abucheos, primero atribuyéndoselos a grupos radicales y ahora tratando de forzar a la oposición a que los condenen, so pena de alinearla con la extrema derecha".

En La Gaceta, Carlos Dávila está superenfadado y hoy no es con Zapatero ni con De la Vega. "No soportamos, o mejor dicho, yo no soporto, ni un insulto político. Ni de un boberas vanguardista que pasa por Madrid vendiendo el separatismo de su diario que tan a gusto vivía con Franco (suponemos que se trata de La Vanguardia), ni de un director que ha hecho del Periodismo, como nosotros, un reto vital. Por tanto, a lo nuestro, pero volvemos a avisar: no estamos quietos, miedo, ni siquiera a Torquemada De la Vega". El del "reto vital" es Pedro J., que ayer dijo que "hay una extrema derecha que renace, y no hay más que ver cómo en el quiosco ya hay quien llega marcando el paso a dar satisfacción a los nostálgicos de El Alcazar". Esta guerra promete.

La Razón dice que Chacón quiere proteger a Zapatero con una "ley antiabucheos" y se pregunta si la ministra "piensa en amordazar a los asistentes al desfile e infiltrar comisarios antiabucheos". Juan Pablo Colmenarejo cree que lo que pretende Chacón es "una ocurrencia poco consistente con trazos de despotismo sin ilustrar" y que "el PSOE debería recordar el acoso y derribo al PP en 2004 en vez de llenar el discurso con la siempre socorrida extrema derecha que vale para un roto y un descosido de la izquierda oficial".

Y en ABC, Edurne Uriarte se parte, y yo con ella, con una "izquierda abrazada a la Fiesta Nacional, a la bandera, a la nación, al ejercito, a los caídos por patria, alertando de la derecha que quiere destruirlos y dispuesta a defender las esencias de la nación. Del doberman explotador, xenófobo, clasista y ultrarreligioso... pasa ahora el PSOE al doberman que quiere destruir la Fiesta Nacional. Lo que debe de haber sumido a los votantes socialistas en la más profunda perplejidad. "Una cosa es asumir todas las medidas del odioso liberalismo... y otra que su partido se les convierta a estas alturas en el principal abanderado del nacionalismo español". "El doberman se ha vuelto loco".

Para finalizar, un popurrí de frases sobre los mineros a elegir. La Razón: "Frailes evangélicos, monjas y vendedores de seguros deambulan por el campamento". ABC: "Emoción, milagro, euforia, vida". La Gaceta: "El ascenso en la cápsula desde la mina ha sido excelente, casi como un crucero". El Mundo: "Yonni Barrios, el enfermero, pidió que le esperaran su amante y su mujer; ésta se negó". El País: "Salieron de la mina 33 hombres mucho más religiosos de lo que eran antes". Público: "Nací para morir amarraíto al yugo". Juro que no es la letra de un cante de las minas o de un corrido (mis conocimientos musicales son escasos). Como titular, yo me quedo con éste.

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