L D (EFE) Rosa Valdeón, dijo que "ésta y la siguiente semana son cruciales para que se tomen las decisiones" respecto a Diego L.B, conocido como "el niño del Royo". La consejera informó de que en los próximos días se enviarán al titular del juzgado número 6 de Salamanca, encargado del caso, los informes elaborados por los servicios asistenciales respecto a la situación del menor y la evolución experimentada en el año y medio que lleva viviendo con su madre biológica. Así, indicó que la Junta "siempre va a luchar por el beneficio del menor que nos preocupa mucho por las especiales circunstancias en las que vive".
En este momento, Diego se ha integrado de nuevo en el centro de acogida María Dolores Pérez Lucas de Salamanca y al que fue trasladado desde Madrid por los Servicios Sociales y "se encuentra muy bien", comentó la consejera. Durante el período en el que el pequeño ha convivido en el domicilio materno, Valdeón subrayó que ha estado bajo las directrices de un programa de intervención "con consultas a veces diarias en la propia casa". La responsable de la consejería de Familia de la Junta de Castilla y León comentó que se han producido ocasiones de "enfrentamientos entre los responsables de los servicios sociales y la madre, Margarita Bernal, que han provocado tensiones".
Sobre un posible informe psicológico de la madre biológica, Valdeón apuntó que debe ser el juez quien lo solicite, ya que la Junta no tiene competencias en ese aspecto, sino en la evolución del niño y en el período de convivencia con su progenitora.
El pequeño se encuentra desde el miércoles pasado en un centro de menores de Salamanca después de ser encontrado junto a su madre pidiendo, al parecer, limosna en el Metro de Madrid, algo que ésta ha negado.
El menor fue entregado en régimen de acogimiento con fines preadoptivos en mayo de 1999 a un matrimonio de El Royo (Soria), debido a la enfermedad mental de sus padres, a los que la Junta de Castilla y León retiró la tutela, pero tras 22 meses con la familia preadoptiva un juez decidió su ingreso en un centro de acogida y la Audiencia de Salamanca dictó el pasado noviembre una sentencia en la que establecía que el niño viviese con su madre biológica.