(Libertad Digital) La jefa de prensa del PP, Carmen Martínez Castro, se ha querellado contra Víctor Gago por un delito de injurias a raíz de unos comentarios del periodista en el programa "Los últimos de Filipinas" de Radio Intereconomía. En concreto, Gago criticó la política de comunicación del PP. "Dije cosas que todo el mundo sabe, que el PP utiliza la comunicación para esparcir insidias contra dirigentes que no están de acuerdo con Rajoy, como ha ocurrido en el caso San Gil o con Aznar. Señalé a la jefa de prensa responsable de esa política de comunicación de intoxicar y desprestigiar a dirigentes críticos y esa crítica me ha valido una demanda por injurias", explicó Gago.
Tras recibir la demanda, se le ofreció a Martínez Castro la posibilidad de rectificar y no lo ejerció, sino que fue directamente a la demanda judicial "que me llegó en estas entrañables fechas navideñas". La colaboradora de Rajoy pide tres cosas: que Gago reconozca que es el autor de los comentarios, se retracte y una indemnización que dice va a donar a una ONG.
Víctor Gago se mostró especialmente dolido por que haya periodistas que hagan "sangre fácil y leña del árbol caído" con su caso. "Hay confidenciales que dicen que me está bien merecido". "Yo me equivoco todos los días, pero nada justifica esa iniciativa penal ni la calificación de delincuente cuando llevo 16 años ejerciendo sin vulnerar ninguna norma. Triste canto de cisne para alguien que se dedica a otros menesteres".
El delegado del ABC en Cataluña, Pablo Planas, presente en la tertulia, consideró que las demandas "es una medalla para los periodistas" y denunció la agresión de los poderes públicos a la libertad de información.
El analista político Florentino Portero, por su parte, recordó que precisamente Carmen Martínez Castro criticaba este tipo de actitudes cuando era periodista y apoyó los comentarios que a Gago le han valido la denuncia. "Yo sabía también de la política del PP respecto a otras personalidades. Personalmente denuncié en esta tertulia el comportamiento cobarde repecto a San Gil" y se mostró de acuerdo con Planas de que las demandas son "medallas" y que los periodistas "se forjan en estas lides dando forma a periodistas de raza como es Víctor Gago".
Florentino Portero se mostró además convencido de que la iniciativa parte de la presidencia del PP. Martínez Castro no es político. Antes de hacer eso ha tenido que consultar con su jefe y este dar su visto bueno. Es un acto de la presidencia del PP contra un periodista liberal. El PP se muestra generoso con los medios de la izquierda y autoritario y amenazante con los periodistas liberales críticos con la forma de hacer política de Rajoy. Servidumbre respecto a PRISA y y amenazante con los liberales críticos, eso es lo que representa hoy el PP".
José García Domínguez puso de manifiesto la diferente sensibilidad que tiene el PP en cuanto a los límites de la libertad de expresión recordando el caso de Maruja Torres cuando llamó "hijos de puta" a los votantes del PP. "El PP no consideró oportuno dirigirse al juzgado para que rectificase". Así mismo recordó cuando Pedro Castró llamó "tontos de los cojones" a los votantes del PP. "Martínez Castro no debe estar en desacuerdo porque no ha tomado ninguna iniciativa para que se corrija. Sólo se atreve con Gago, que no dispone de ninguna columna ni micrófono, que tiene una defensa precaria y sólo se atreve a intentar tapar la boca a un liberal conservador".
García Domínguez se mostró convencido de que al final esta demanda favorecerá a Víctor Gago y perjudicará a Martínez Castro, que aparecerá como "liberticida" de la libertad de expresión cuando su nombre se meta para hacer una búsqueda en Google.